Iván Velásquez: un lobo con piel de oveja

Iván Velásquez: un lobo con piel de oveja

El actual ministro de Defensa de Colombia Iván Velásquez es un sujeto oscuro sobre el que pesan muchísimas acusaciones por abusos y posibles delitos tanto en Colombia como en Guatemala. 

Durante algunos años se desempeñó como magistrado auxiliar de la sala penal de la corte suprema de justicia de Colombia. Le correspondió impulsar la investigación de la llamada ‘Parapolítica’, proceso por el que un abultado número de senadores, representantes a la Cámara y gobernadores terminaron condenados. 

Velásquez salió por la puerta trasera de la corte, pues muchos magistrados repudiaron la manera como llevó sus investigaciones. Hubo irregularidades. La primera de ellas: la creación de un expediente macro del que sacaba a su antojo evidencias contra las personas que estaba investigando. De esa manera pudo acomodar pruebas violando normas elementales del debido proceso. 

Uno de los mayores escándalos protagonizados por Velásquez fue el de la manipulación de testigos con los que pretendió vincular al exsenador y exvicepresidente de la República Germán Vargas Lleras con la ‘Parapolítica’. Efectivamente se conocieron grabaciones del hoy ministro de Petro emborrachando a una testigo para que le ayudara a conseguir una declaración de algún cabecilla del paramilitarismo en el departamento de Casanare en contra de Vargas. Su objetivo consistía en construir ficticiamente una relación de Vargas con la estructura armada ilegal que comandaba alias ‘Martín Llanos’.

Luego de su salida de la corte fue nombrado como director de una comisión de la ONU contra la corrupción en Guatemala. Se trataba de un equipo consultivo encargado de hacer un diagnóstico en el país centroamericano. Velásquez -genio y figura- hizo de las suyas y extralimitó sus funciones. En 2016 el dirigente guatemalteco Ricardo Méndez Ruiz denunció al colombiano por múltiples delitos: ejecución extrajudicial, conspiración, asociación ilícita, obstrucción a la justicia y abuso de autoridad. 

Méndez no dudó en señalar a Iván Velásquez de haber participado en el asesinato del exministro de Finanzas de Guatemala Pavel Centeno quien murió en extrañas circunstancias. 

Según las versiones oficiales, el exministro se suicidó mientras las autoridades adelantaban un allanamiento en su lugar de residencia. Para muchos se trató de un homicidio y, según Méndez Ruiz, Velásquez hizo parte del atroz crimen. 

El poderoso funcionario de Petro vuelve a estar en la mira de las autoridades de Guatemala. La justicia de ese país, en desarrollo de la investigación por la corrupción de la empresa Odebrecht, dice contar con evidencias suficientes que apuntan a que Iván Velásquez, en su calidad de director de la comisión contra la corrupción, colaboró para que directivos de Odebrecht involucrados en pagos de sobornos quedaran impunes. 

Cuando se reveló que es muy probable que la justicia guatemalteca libre una orden de captura contra el ministro de Defensa de Colombia, Petro reaccionó con virulencia, en una actitud que le desluce a un jefe de Estado que se dice democrático. 

Las decisiones de la justicia deben respetarse, máxime cuando se trata de determinaciones que provienen de países amigos.

El asunto del cuestionado Iván Velásquez es gravísimo y el gobierno colombiano, en vez de adoptar una actitud hostil hacia Guatemala, debería observar una conducta respetuosa y civilizada. Petro está comportándose de la misma manera como lo hacía el dictador venezolano Hugo Chávez cuando desde terceros países surgían decisiones que no eran de su agrado. 

Por ahora, que Velásquez consiga un buen abogado y que responda por todos los delitos que le están siendo imputados por la fiscalía guatemalteca. Y ojalá que se defienda apartándose de la calidad de ministro de Defensa de Colombia. 

@IrreverentesCol

Publicado: enero 18 de 2023

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