Congresista uribista asegura que los cabecillas de las Farc algún día serán condenados por haber reclutado a miles de niños.
De todos los actos de barbarie de las Farc, el reclutamiento de menores es, sin duda alguna, el más abominable. Se trata de un crimen que se comete de manera recurrente y silenciosa. Las víctimas son niños humildes, cuyos padres, atemorizados por el poder intimidatorio de los terroristas, raramente denuncian el reclutamiento de su hijo.
A Juan Manuel Santos y sus negociadores en La Habana, poco les importó el asunto de los menores. Tratándose de personas protegidas por el Derecho Internacional Humanitario, resulta inaceptable el desdén con el que la delegación del gobierno colombiano atendió el drama que afecta a miles de hogares en todo el país.
Los negociadores de Santos le mintieron a Colombia. Aseguraron haber exigido la devolución de los niños. Hace más de 3 años las Farc anunciaron que empezaría la desvinculación de los menores y no han cumplido. Hasta ahora, sólo han liberado a 13 de ellos.
Desde que comenzó el proceso de paz con las Farc, algunas personas reclamaron la devolución de todos los niños como condición para avanzar. Una de ellas fue la parlamentaria uribista Margarita Restrepo quien lleva 3 años denunciando y evidenciando esa tragedia que afecta a miles de menores que fueron arrebatados de sus hogares y que hoy se encuentran en la profundidad de las selvas sirviendo como esclavos en las Farc. En diálogo con LOS IRREVERENTES, la congresista puso en evidencia las contradicciones y mentiras que se han dicho con relación a los menores reclutados: “Hace unos días el terrorista Timochenko aseguró que las Farc sólo tienen 23 menores. Esa es una absoluta mentira. Sabemos que esa organización tiene en su poder entre 2 y 3 mil menores, de acuerdo con estadísticas y proyecciones que han hecho expertos en la materia. Me preocupa que el gobierno sirva de cómplice de los terroristas que, para evitar el castigo que temprano o tarde les llegará por haber esclavizado a la niñez colombiana, ejecuten una desaparición masiva de esos menores”.
Restrepo asevera que el perdón que les concederá el gobierno de Santos a los cabecillas de las Farc tarde o temprano terminará cayéndose: “He insistido que la impunidad frente a crímenes de lesa humanidad no es sostenible en el tiempo, particularmente en lo que se refiere a reclutamiento sistemático y masivo de menores de edad que es una modalidad de esclavitud. La Corte Penal Internacional ha proferido ejemplarizantes sentencias a criminales de guerra por un solo crimen: haber utilizado a menores de edad para sus acciones de violencia. Así que los risueños Iván Márquez, Pablo Catatumbo, Joaquín Gómez y Timochenko terminarán respondiendo por haber destrozado la vida de miles de niños colombianos. Como no lo harán ante la justicia colombiana, entonces vamos a llevarlos a los tribunales internacionales”, asegura la congresista del Centro Democrático.
Resulta inaceptable el manejo que a los menores de edad le ha dado el gobierno. Humberto de La Calle engañó al país. Como jefe negociador y agitador político del SÍ en el plebiscito aseguró que las Farc iban a devolver a todos los niños. Todo era un embuste para conseguir votos. Al futuro candidato presidencial de la coalición Santos-Farc lo tiene sin cuidado la suerte de los niños. Le da lo mismo si viven o mueren. Su interés se centraba en lograr que el acuerdo final se firmara para, acto seguido, empezar su campaña por la presidencia de la República.
Con el perdón anticipado que Santos les concedió, los cabecillas de las Farc, que son unos criminales natos, se sienten con la libertad de seguir violando la ley con toda libertad. Al tener la certeza de que la impunidad los acompañará por el resto de su existencia no van a liberar a los menores.
Por eso, el gobierno, que es tan arrogante frente a las iniciativas de la oposición, debería atender la propuesta del presidente Uribe que apunta a suspender la aprobación en el congreso del acto legislativo que incorpora a la Justicia Especial para la Paz hasta que las Farc devuelvan a todos los niños.
Pero como era de suponer, el ministro Juan Fernando Cristo, haciendo las veces de abogado de las Farc, descartó la sugerencia de Uribe, indicando que “el Centro Democrático, no sabe cómo oponerse más a la paz”.
Publicado: enero 26 de 2017