Cada día vemos más hurtos, robos de celulares, atracos a ciclistas, homicidios, feminicidios y ahora, en las calles de la Bogotá Salvaje, empieza a aparecer el horror de desmembramientos humanos, una realidad que sumada a vivir con el Covid19 hacen de nuestra capital un lugar a la deriva que a la alcaldesa parece no importarle.
Yo le pregunto a Claudia: ¿hay casas de pique en Bogotá; sabe en dónde desmembraron los siete cuerpos que han aparecido en bolsas de basura en las calles de la Bogotá Salvaje?
La prueba de que Claudia está dejando la seguridad de Bogotá en manos de la delincuencia, es que el tetrabillonario presupuesto presentado por ella ante el concejo de la ciudad, contempla una miserable partida para enfrentar a la delincuencia.
Con esa triste realidad, en la Bogotá Salvaje, la inseguridad seguirá campeando.
Claudia López parece que no se ha dado cuenta – si se ha dado cuenta, es aún peor – que para solucionar la ola de inseguridad que devora a nuestra ciudad, se necesitan recursos, una política seria de seguridad ciudadana, una fluida colaboración y diálogo respetuoso con la Policía; pero, ninguna de las anteriores acciones se han tomado y ahora, se confirma la terquedad e ineficiencia de la alcaldesa, al no presupuestar una partida razonable con la que se pueda combatir a la criminalidad.
En el concejo de Bogotá se está llevando a cabo el debate del presupuesto de Bogotá para el 2021; sorprendentemente, mientras el sector seguridad apenas recibe un 2.9% de un presupuesto de 20.1 billones, -587 mil millones- otros sectores como la recreación, el deporte e integración social – dirigidos por el círculo íntimo de Claudia López -, reciben presupuestos de 4% y 7% – entre 773 mil millones y más de un 1.2 billones – .
Esto lo que demuestra es que la inseguridad de los bogotanos no es un problema que trasnoche a la alcaldesa, a ella la trasnochan otros frentes, esos que pueden apalancar a sus futuros electores, esa maquinaria que aceita y enmermela pensando en el 2022 para su tibio candidato, el que tiene la misión de cuidarle el poder hasta el 2026.
Las partidas presupuestales que ha presentado Claudia y que aprobará con su maquinaria, no son gratis: tienen fines políticos, olvidarse de la seguridad y dejar a la Bogotá Salvaje en manos de los criminales, parece ser uno de ellos.
Esto parece increíble, pero no lo es; Claudia López, siendo la primera autoridad de policía, sabiendo cómo nos asfixia la delincuencia y hasta habiendo sido, ella misma, agredida por la turba violenta en días pasados, nos está dejando sin recursos suficientes para defendernos. Si a ella misma le ocurre lo que le ocurrió, ¿qué podemos esperar el resto de los ciudadanos?
¿Acaso Claudia nos manda a acogernos a: sálvese quien pueda?
Ahí no para la cosa, desde hace tiempo he venido denunciando que en la Bogotá Salvaje sufrimos con la mediocridad del secretario de seguridad Hugo Acero; ese oscuro funcionario, tozudamente protegido por Claudia López, es un incapaz sin compromiso para enfrentar una lucha frontal contra los delitos que tienen con miedo a los bogotanos.
La sordera de Claudia, el miserable presupuesto que destina para seguridad, mantener a Hugo Acero en el cargo, parecieran una perversa estrategia del caos; de lo contrario, no se entiende tanta torpeza junta.
Las recomendaciones del secretario de seguridad de esta Bogotá Salvaje, son ridículas; Acero afirma que el problema de inseguridad es de percepción y no de realidad, su gran aporte es recomendar que no descuidemos las ciclas en las calles porque se las roban y que evitemos ver tanto noticiero. Hugo Acero dice estupideces y Claudia lo respalda en cargo.
No contento y para tratar de salir bien librado, Acero afirma que hay reducción de delitos este año, en una abierta burla de comparar el 2019 con un 2020 de pandemia, año en el que estuvimos encerrados en una de las cuarentenas más extensas del mundo. !Payaso!
Así estamos: en la paradójica situación de una ciudad carcomida por la inseguridad, en la que la seguridad no es una prioridad; así se refleja en el presupuesto distrital propuesto, en tener al frente de la secretaría de seguridad a un incapaz, esto explica por qué hoy reinan el caos y el miedo por falta de autoridad en esta Bogotá Salvaje.
Coda: ¿Es cierto que Hugo Acero, en un único arranque de responsabilidad renunció a su cargo y Claudia le dio un portazo: “A mi nadie me renuncia antes de cumplir el primer año de gobierno”?
Publicado: noviembre 29 de 2020
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