Laureano Tirado: Hambruna en Venezuela

El único legado que dejo Hugo Chaves, fue dejar a miles de venezolanos en la miseria y mendicidad, y a otros miles escarbando en canecas de basura para logar calmar el hambre.

Algunos despistados  se niegan a creer que Venezuela fue potencia económica. Eran tan grandes las diferencias con nuestro País que más de dos millones de colombianos que no tenían recursos o la oportunidad de migar a los EE.UU. lo hicieron hacia Venezuela buscando un mejor futuro, mejores ingresos para ellos y sus familias: lo encontraron.

Colombia también se benefició de la bonanza económica de Venezuela. Regiones fronterizas como Norte de Santander, Guajira, Cesar, Arauca y Santander fueron puertos de la economía subterránea que se movía entre las dos naciones. Los antiguos “san andresitos” eran epicentro de la compra y venta de innumerables productos venezolanos con menor precio y calidad frente a los ofrecidos en el mercado local o en su mayoría la oferta de mercancías eran desconocidos para el consumidor colombiano.

Venezuela fue un sueño para millones de colombianos y el paraíso para los venezolanos.

Como en la crónica bíblica del libro del éxodo, las siete plagas llegaron y arrasaron con Venezuela.

Venezuela es un país tropical, culturalmente caribeño, donde la playa, el mar, la fiesta, la música, el carnaval, las reinas y la política juegan papel fundamental en la vida cotidiana de sus gentes: sus gobernantes lo entendían así y los gobernados lo exigían así.

Gracias a los precios del petróleo en Venezuela se institucionalizó como política pública   los famosos subsidios y la gratuidad en casi todos los productos de la canasta familiar; el precio del galón de gasolina era cuestión de monedas.

Venezuela también vivió la equivocación del bipartidismo. Después de la dictadura los partidos COPEI y Acción Democrática gobernaron por cuatro décadas. La inestabilidad en los precios del petróleo y los nefastos gobiernos condujeron a Venezuela al descalabro político, económico y social, capitalizado por el coronel Hugo Chaves, quien después de haber intentado un golpe de estado militar y de ser indultado gana las elecciones presidenciales de 1998 con su Movimiento V República.

Hugo Chaves, gobernó para mantener enardecido al pueblo: expropio tierras improductivas por no cumplían con su función social de alimentar al pueblo, persiguió y nacionalizo propiedades de multinacionales, amenazo y encarcelo a sus opositores, ferio el aparato productivo de la economía, acabo con la inversión privada y extrajera.

El “chavismo” instrumentalizó e impuso una ideología y filosofía absurda e inoperante para nuestra época: la bolivariana. Hugo Chaves, redacto una Constituciòn de bolsillo, acabó con la separación de poderes. El Tribunal  Supremo de Justicia, la Asamblea Nacional, las Fuerzas Militares, el Consejo Nacional Electoral, el Poder Ciudadano (fiscalía, Contraloría y Defensoría), gobernaciones y alcaldías terminaron al servicio del proyecto mesiánico, populista, unipersonal y fascista de Hugo Chaves y su revolución.

Chaves también término preso del petróleo. Sus primeros años de gobierno fueron favorecidos por precios inimaginables en el barril que le permitieron financiar su proyecto dictatorial y asistencialista; también le alcanzo el dinero para expandir y financiar gobiernos y proyectos revolucionarios en Cuba, Bolivia, Argentina, Ecuador y Nicaragua. En Colombia, para desgracia de la historia y de nuestro futuro, termino financiando y protegiendo a los grupos narcoterroristas de las Farc y el Eln.

Venezuela escogió el camino del populismo, del debilitamiento y aniquilamiento institucional, el de la lucha de clases, el discurso incendiario e irracional que moviliza masas y enceguece.

Hoy Venezuela está sin alimentos, si medicina, sin salud, sin educación, sin servicios públicos estables y de calidad, sin justicia, presa de la anarquía, de los delincuentes, extorsionada por un gobierno en decadencia que juega con las necesidades básicas de sus pocos gobernados, esos zombis que todavía admiten que los gobierne un mentecato como Nicolás Maduro, heredero de un proyecto revolucionario y corrupto que tiene sumida a Venezuela en la hambruna total.

Ruego y oro a mi Dios que llegue la libertad y democracia a nuestra hermana República de Venezuela por el camino que sea, porque la libertad y el fin de la hambruna no se consiguen con caminatas y manifiestos.

@laureanotirado