Rafael Gómez Martínez: Cruzaron el Rubicone

Las guerras civiles en el Imperio romano junto con su posterior caída, tuvieron un origen. Frente al río Rubicone que separa a la Galia de Roma, Julio César se encontraba con sus tropas. En la antigua Roma existía una costumbre. Consistía en que ningún oficial del ejército entraba con armas una vez cruzado el Rubicone.

Julio César fue un personaje bien particular. Según Philip Freeman, Julio César, 2008: El coraje y el honor marcaron su llegada al escenario romano pero una vez en el, se dejó llevar por la ambición del poder y la vanidad. Después de hacer alianzas con sus amigos para llegar al poder, los abandonó. Hizo alianzas con sus enemigos corriendo la misma suerte.

A comienzos del año 50 A de C, Cicerón le escribió una carta a Ático: El estado actual de las cosas en el Imperio romano me aterra. Casi toda la gente prefiere darle a César lo que pide, sin pensar que César está llevando al pueblo romano a una guerra civil interna.

El cuadro de Cicerón era confuso y oscuro. Por un lado, apoyaba la Paz que promulgaba Julio César a sabiendas que esa paz no era la que le convenía. Pompeyo, principal enemigo político de Julio César comenzaba a ganar adeptos por sus reparos a su forma de gobernar. Por momentos, Cicerón jugaba con Julio César y con Pompeyo a la vez.

En la medida en que la crisis de gobernabilidad fue más profunda, los moderados, optimates, parecían correr la misma suerte de Cicerón. Por un lado, si no apoyaban a Julio César veían cómo todo el poder del régimen les caía encima. Ellos sabían que el grupo liderado por Pompeyo tenía la razón. El temor reinaba en Roma.

A finales de diciembre del año 50 A.de C, las discusiones en el Senado eran álgidas y agrias, como diría el greco caldense Humberto de la Calle. La incertidumbre crecía. Tras varios días de acalorados debates Julio César fue declarado enemigo de Roma, abandonándola cargado con piel de tigre.

El 10 de enero cabalgó por la ronda del Rubicone durante toda la noche, con las fogatas encendidas. A media noche exclamó: Alea jacta Est . Julio César cruzó el Rubicone con tan solo una legión, con armas, sometiéndola. No tardó mucho tiempo la posterior caída del Imperio romano después de cruzar el Rubicone.

Un paréntesis: Acaba de salir la película Ben Hur, un remake de la famosa película con Charlton Heston, ahora con Morgan Freeman como actor principal. Nada más parecido a lo que se vivió bajo Julio César que lo que se describe en Ben Hur.

La anterior introducción para comentar que así como Julio César abandonó a sus amigos una vez en el poder, JMS hizo exactamente lo mismo en medio de una vanidad infinita. Así como a Julio César solo le interesó el poder por el poder mientras el Imperio romano llegaba a su fin, a JMS solo le interesa su paz mientras el país se desmorona.

Así como las clases dirigentes de la época romana solamente les interesaba apoyar al régimen de turno, a las clases dirigentes que rodean a JMS solamente les interesa cuidar de sus intereses.

Así como nadie se atrevió hacer algo durante la época de Julio César, todo el régimen político actual colombiano, el mismo que llevó al elefante al poder con dineros del narcotráfico, prefiere darle a JMS todo lo que pide, sin pensar que está llevando a Colombia al Socialismo Bolivariano del siglo XXI que con tanto éxito condujo a Venezuela a la ruina.

Así como Julio César cruzó el Rubicone con armas, el miércoles 24 de agosto, después de una larga espera, los niños de Iván cruzaron el Atlántico; con armas, con impunidad, sin reparar a las víctimas, sin pedir perdón, sin entregar a los niños reclutados, sin un ápice de remordimiento de consciencia. Súbitamente, se producen milagros y la luz se hace para los ciegos.

Al igual que Cicerón, el estado actual de las cosas en Colombia me aterra. La incertidumbre y el temor comienzan a gobernar a los colombianos.

Como lo mencioné en una anterior columna de opinión, de la resistencia civil a la confrontación, solamente habrá un paso. Alea jacta est.

Puntilla: a partir de la fecha hasta el 2 de octubre, la presente columna de opinión contará el collar de perlas, de color negro. Vivanco: Es ingenuo construir la paz sobre bases tan grotescas de impunidad.

 

@RaGomezMar