Cambios necesarios

Causaron mucho alboroto los comentarios que hizo el nuevo Ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, en la última semana durante diferentes convenciones a las que asistió en Cartagena. Si antes los temas económicos eran tratados e interesaban solamente a especialistas, hoy en día, en el mundo de las redes sociales, de la nube y en el que todos nos sentimos con la capacidad de opinar, le tergiversaron muchas de sus palabras.

No dijo nada diferente a lo que siempre se ha dicho: que se debe ampliar la base de contribuyentes porque son muy pocos los que pagan impuestos frente a la media internacional; que se deben bajar los impuestos a las empresas que son las generan empleos y pagan el 85% del impuesto mientras las personas naturales pagan el 15%; y que se debe hacer un censo de las personas de altos recursos para que no se aprovechen de los subsidios que se dan a las personas de escasos ingresos.

Y es que vi un dato alarmante que tiene relación con la desigualdad tan grande que existe  y que tanto pregonan los líderes de izquierda: los subsidios que se entregan en Colombia por diferentes vías no están llegando eficientemente a las personas que de verdad lo necesitan. Esto, por consiguiente, aumenta la desigualdad.

El caso más fehaciente es el de Colpensiones, en donde son muchísimos los casos de pensiones altas y el beneficiario de esta nunca la hubiera tenido por cuenta de su ahorro individual en un fondo privado. La revisión del modelo de prima media es indispensable para cerrar un hueco fiscal que ya casi está llegando a la tercera parte del presupuesto.

Realmente, a diferencia de lo que pasó en el gobierno anterior donde se aprovecharon los ingresos adicionales del petróleo para crecer el aparato burocrático, aumentar los cupos indicativos y las vigencias futuras, lo que necesitamos del equipo de hacienda del gobierno Duque es cabeza fría y mirar cómo se pueden volver a estabilizar las finanzas, bajar el derroche, disminuir el tamaño del Estado y hacer las reformas necesarias para tener la sostenibilidad fiscal que mantenga las calificaciones de riesgo internacionales que son necesarias para mantener tasas bajas de financiación y de crédito disponible.

Afortunadamente, existe un compromiso del Ministro de Hacienda por respetar la norma fiscal que, aunque perece lógico, muchos candidatos a la presidencia pensaban no hacerlo. Por cuenta de esto la capacidad de maniobra del gobierno es poca, primero porque para lo que queda del año no quedan muchos recursos y segundo porque el presupuesto del 2019 viene preliminarmente con menos recursos para inversión.

Otro de los temas tratados por Carrasquilla fue el de hacer otra misión de capitales, tema bastante necesario. Desde el año 2012, año de la caída de Interbolsa, el mercado de capitales viene de capa caída. Cada vez hay menos emisores y los volúmenes de negociación no reaccionan, pero, sobre todo, se ha vuelto un mercado de inversionistas institucionales. Los fondos de pensiones y los fondos de inversión extranjera son los mayores inversionistas mientras que las personas naturales son cada vez menos relevantes. A mi modo de ver, para que reaccione el mercado, se deben hacer rentables las sociedades comisionistas de bolsa que, por cuenta de la estructura legal que deben tener, quedan paquidérmicas y han tenido que dejar de lado la masificación del negocio por no ser rentable.

Esperemos que estos cambios tan importantes para el futuro y sanidad de las finanzas del país lleguen a buen recaudo y que las mayorías en el Congreso funcionen porque, de lo contrario, seguro tendremos unos años muy difíciles por venir. 

Después de una buena fiesta, con bastantes excesos, llega la resaca. Lo malo en este ejemplo es que unos fueron a la fiesta y otros se quedaron con la resaca.

@SANTAMARIAURIBE

Publicado: agosto 27 de 2018