Las Farc no van a entregar más niños reclutados. Así lo han dicho abiertamente, y sin ningún reparo, ante la opinión pública. Lo más grave es que esta semana, alias “Iván Márquez”, cabecilla de este grupo terrorista, afirmó frente a la prensa que abordar el tema de los menores de edad que estaban en sus filas son ganas de joder de los periodistas, que buscan generar polémica.
Esto es indignante, infame y canalla. Más cuando el gobierno de Juan Manuel Santos se ufana de su proceso de paz y más cuando insiste en que sus acuerdos están basados en la verdad, la justicia y la reparación. ¡Mentiras! Eso solo es un discurso politiquero porque los hechos no corresponden con las palabras.
En efecto, los plazos del proceso de paz de Santos no existen, los acuerdos no se cumplen y lo más grave: la injusticia y la impunidad reinan en este proceso. ¡Y nadie dice nada! Los organismos internacionales no se pronuncian, y se supone que son los veedores y garantes de la paz de Santos.
Es grave, gravísimo, lo que están haciendo las Farc con los menores de edad que reclutaron. Ellos solo pretenden tapar esa infamia y darle la menor relevancia posible porque saben que eso es garantía de no ir a la cárcel. Y ante eso, el gobierno nacional, solo se comporta como un cómplice que encubre este delito.
Pero no nos podemos quedar callados. Estamos ante un delito de lesa humanidad, que no es amnistiable ni indultable. Lo que hizo la guerrilla de las Farc fue secuestrar niños; robarles su infancia y su inocencia; usarlos como carne de cañón; abusar psicológica, física y sexualmente de muchos; e involucrarlos en una guerra para sus propósitos ilegales y dementes.
Y eso no se resuelve saliendo a hacer “llamados” ante la prensa, como pretende el gobierno de Juan Manuel Santos. Qué falta de determinación y que poco interés demuestran el presidente y sus ministros por los niños de nuestro país. Esto es una burla para esos pequeños y para esas familias que perdieron a sus hijos.
Entre tanto, las Farc se dedican a engañar a todos los colombianos de bien, a hacerle el quite a los temas importantes que aborda la prensa, a evadir la verdad porque no les conviene pagar un solo día de prisión. Solo les importa su partido político, su dinero y sus estrategias para llegar al poder. ¿Los crímenes?, ¿cuáles crímenes?, dirán. Y así pasan los días, y las declaraciones y las burlas.
Pero estamos hablando, según expertos, ¡de 2.000 niños que fueron reclutados por esa guerrilla! ¿Dónde están? ¿Qué los hicieron? ¿Están vivos? ¿Por qué hasta la fecha solo se habla de 57 menores entregados? ¿Por qué tanto misterio?
Yo sí quiero saber ¿qué va a pasar con este tema de los menores reclutados por las Farc? ¿Cuáles son las medidas que va a tomar el gobierno? ¿Cuáles son los plazos reales? ¿Cuáles son las consecuencias de la no entrega de todos los menores?
Estas no son ganas de generar polémica porque sí. ¡No faltaba más! Estas son ganas de tener justicia, verdad y reparación. Por eso seguiremos “jodiendo” hasta que las Farc devuelvan al último niño que reclutaron.
Publicado: julio 28 de 2017