Alberto Bernal: Los virajes ideológicos de la región

Hace unos días conversaba con un inversionista de Londres sobre el futuro político de Latinoamérica. Este inversionista y yo coincidíamos en que la región pareciera estar encausada en una senda de “corrección ideológica”, una que implica que quizás estemos cercanos a un momento en el cual nuestra región por fin deja atrás tantos años de gobiernos de izquierda, unos que solo han dejado menor crecimiento potencial. Pero ambos coincidimos en que hay dos países relevantes de la región que corren riesgo de virar hacia la izquierda: México y Colombia.

No es por ser fatalista. Es simplemente una visión realista. Comencemos por las buenas noticias. Argentina está hoy inmersa en una senda benévola para con su economía y sus mercados. Por ejemplo, el banco de inversión Morgan Stanley pronosticó hace unos días que el mercado de acciones de Argentina podría subir de valor hasta un 285% durante los próximos 5 años, gracias a las políticas pro-mercado que ha comenzado a implementar la administración Macri. En el caso de Brasil, el 2017 va a ser un año de crecimiento, el primero en cuatro años, gracias a las políticas pro-mercado que ha implementado la administración Temer. El daño económico y de calificación crediticia que le dejó a Brasil el Partido de los Trabajadores no tiene precedentes, obviamente guardando las proporciones con Venezuela, país que no tiene futuro diferente al de sufrir una mega revolución social donde miles de personas perderán sus vidas. La gente de Venezuela votó por Hugo Chávez y su comparsa de mafiosos ignorantes, y desafortunadamente, todo en esta vida tiene sus costos.

La situación de México a futuro se está viendo complicada. El presidente Peña Nieto logró la aprobación de reformas estructurales de altísimo calado por el lado fiscal, energético, y de telecomunicaciones. Pero desafortunadamente para Peña, el precio del petróleo colapsó al mismo tiempo que era aprobada una excelente reforma energética, y la situación de inseguridad y de corrupción generó una caída violenta en la popularidad de su gobierno. Como si fuera poco, el señor Trump ganó la presidencia de EEUU. Para México no hay por dónde encontrarle un “buen ángulo” a la victoria de Trump. El deterioro en los fundamentales que se está viendo en México por culpa de la administración Trump le está regalando la presidencia a la versión mexicana de Hugo Chávez, el señor Andres Manuel López Obrador, comúnmente conocido como AMLO.

El inversionista de Londres me comentó lo siguiente sobre Colombia: “Alberto, preocupa la división de la derecha en tu país, porque la división es el camino perfecto al fracaso”. Yo no sé a ustedes, pero a mí me parece de un nivel de gravedad inmenso que Gustavo Petro esté liderando las preferencias electorales para la contienda electoral del 2018. Hasta hace unos meses yo pensaba que la contienda la iba a ganar Vargas Lleras con facilidad. Hoy las encuestas muestran que la situación es mucho más incierta.

Colombia necesita que la derecha gane en el 2018. La experiencia de Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Salvador, Brasil, y Venezuela, para nombrar solo unos cuantos ejemplos, demuestra que una vez la izquierda llega al poder, esta tiende a corroer la independencia de los poderes, y por ende destruye el potencial de la economía. Créame, apreciado lector. Si Gustavo Petro llega a la presidencia de Colombia, vamos a destruirle el país a nuestros hijos. Hagamos lo que tengamos que hacer para convencer a los líderes de la derecha de nuestro país que tenemos que llegar unidos a la contienda electoral del 2018.

@AlbertoBernalLe

Publicado: febrero 13 de 2017