Petro ha sido notificado

Petro ha sido notificado

El resultado de las elecciones locales es elocuente. Además de elegir a gobernadores, alcaldes, diputados, concejales y ediles, el pueblo colombiano aprovechó el llamamiento a las urnas para expresar su descontento y, porqué no, repudio al gobierno socialcomunista de Gustavo Petro. 

La elección de autoridades locales se convirtió en un hermoso escenario plebiscitario cuyo resultado es inequívocamente elocuente. Con excepción de Amazonas y Nariño, Petro fue aplastantemente derrotado en el resto del país. Esos fueron los únicos departamentos en los que candidatos coavalados por el denominado Pacto Histórico ganaron en la gobernación. 

Las principales capitales de Colombia quedaron en manos de aspirantes no afines al petrismo

La paliza más importante fue en Bogotá, donde Petro tenía a su principal lugarteniente, Gustavo Bolívar, como candidato. 

El electorado capitalino envió un mensaje contundente a los llamados “Gustavos”. A esos mismos que en plena pandemia, se encargaron de estimular, financiar y proteger a los terroristas que sitiaron a la ciudad. Los delitos cometidos por el binomio quedaron impunes, pero la sanción social no se hizo esperar. A Gustavo Bolívar, el pueblo le ha pasado factura por su alevosía y por el sadismo del grupo delincuencial que él lidera, la llamada “primera línea”. Hace pocos meses se daba por descontado que, gracias a la fuerza del petrismo, él -Bolívar- sería el próximo alcalde de Bogotá. El descrédito del gobierno ayudó al aplastamiento del escritor de novelas de baja factura. Ha quedado en el tercer lugar, sobrepasado por Juan Daniel Oviedo quien le sacó más de 40 mil votos de ventaja. 

Atlántico y Barranquilla, donde Petro arrasó en las presidenciales gracias a las maniobras oscuras de su hijo, el delincuente Nicolás Petro, y de su aliado, el corrupto Armando Benedetti, también hablaron en contra del socialcomunismo. Tanto en la gobernación como en la alcaldía los candidatos de Petro fueron inclementemente castigados. 

En la gobernación de Atlántico se impuso Eduardo Verano de la Rosa sobre el petrista Alfredo Varela y en Barranquilla, como se esperaba, arrasó Alex Char quien aplastó al candidato izquierdista Antonio Bohorquez.

En Medellín Fico Gutiérrez obtuvo una ventaja de más de 60 puntos porcentuales frente a la marioneta de Daniel Quintero Calle, Juan Carlos Upegui. En la competencia por la gobernación, Andrés Julián Rendón -candidato del Centro Democrático- obtuvo una ventaja de más de 200 mil votos frente a Luis Pérez Gutiérrez, que era la ficha del petrismo. 

Un resultado muy elocuente es el de la competencia por la gobernación de Sucre donde el oscuro primo de la mujer de Petro, el señor Mario Fernández Alcocer perdió frente a la candidata Lucy Inés García Montes, respaldada por una coalición de la que hizo parte el Centro Democrático. 

De los siete departamentos de la costa caribe, solamente en uno, magdalena, ganó la extrema izquierda. Hay que recordar que esos departamentos fueron definitivos para el triunfo de Petro en 2022. 

Petro está cada vez más solo. Su coalición parlamentaria hace agua desde hace muchos meses. Los ministros del Interior del gobierno, Prada y Velasco, han dado sobradas muestras de su incapacidad. A esa realidad política se suma el contundente resultado de estas elecciones regionales en las que, a lo largo y ancho del país, quedó claro que el pueblo, en menos de un año y medio, se hastió del modelo retardatario y corrupto que lidera Petro. 

Petro seguirá al frente del país, pero en unas condiciones muy complicadas para él. Ahora no se trata de enarbolar encuestas, muchas de ellas contradictorias, sino de asimilar el resultado de unas elecciones en las que se impusieron corrientes que antagonizan con el programa socialcomunista que hay en Colombia. 

Seguramente se anunciarán cambios en el gabinete. La gente que trabaja con Petro no dura mucho en sus cargos. En 14 meses de gobierno todos los ministros, salvo tres o cuatro, han sido cambiados. Petro tratará de fortalecer su administración metiendo a gente radical tipo Quintero Calle y el resultado será diametralmente distinto al que él espera: el rechazo se catalizará. Basta con analizar el resultado de las votaciones en Medellín, donde el candidato/títere de Quintero -Juan Carlos Upegui- sacó 79 mil votos, 225mil menos de los 304 mil que obtuvo pinturita en 2019. 

La oposición a Petro, que va mucho más allá del uribismo, tiene en sus manos un importante capital político que se espera sepa administrar con inteligencia y con generosidad de cara a la designación del candidato de unidad que se seleccione para reemplazar a Petro en las elecciones de 2026, en el entendido de que se cumpla el precepto constitucional que fija el periodo presidencial, algo que, a estas alturas, está en duda por cuenta del talante bilioso y dictatorial del terrorista del M-19 que ejerce la primera magistratura de la nación. 

@IrreverentesCol

Publicado: octubre 30 de 2023