Incendiaron a Colombia arengando que el establecimiento era corrupto, criminal, asesino e indolente. Dijeron que ellos eran personas pulcras, excluidas, sin oportunidades, pero con ganas y capacidad para cambiar al país.
Desde siempre se les cuestionó su idoneidad y la respuesta automática se limitaba al alegato de que cualquier reparo frente a ellos eran manifestaciones elitistas, racistas y misóginas -cuando la señalada era una mujer-.
La experiencia brilla por su ausencia en el llamado ‘Pacto Histórico’. El grueso de los elegidos en Cámara y Senado por la congregación socialcomunista de Petro fueron gentes sin trayectoria ninguna. El común denominador en sus currículos es la calidad de “activista”, oficio que lo dice todo y no dice nada.
Entre los elegidos apareció quien se presenta como directora de orquesta Susana Gómez Castaño, mujer que utiliza a diario y para su trabajo legislativo el nombre artístico de Susana Boreal.
En todos los lugares del espectro ideológico hay personas de notoria inteligencia superior, y también se encuentran algunos que se destacan, pero por su estulticia.
En el marco de la discusión del proyecto que pretende legalizar el uso recreativo de la marihuana, debate que debe ser avocado con criterio científico y con estadísticas médicas, la señora Boreal tomó la palabra para defender la aprobación del mismo. Sustentó su solicitud en el hecho de que, en palabras suyas, ella es consumidora diaria de marihuana. Nada más. Ni un concepto médico, ni una valoración de posibles efectos secundarios.
Sus palabras atrajeron la atención de la opinión pública, hecho del que se valió un examigo y excolaborador suyo para hacer una denuncia sobre abuso laboral e incumplimientos.
El quejoso no se guardó nada. Publicó en las redes sociales todo lo que tenía, incluida una nauseabunda fotografía de la Boreal tirada sobre un sucio colchón, abrazándose con un sujeto que, de acuerdo con las denuncias, es su pareja permanente: Christhian -se escribe con doble H- David Guzmán Romero.
Indagando en los documentos del Congreso aparece que Guzmán Romero es integrante de la UTL -Unidad de Trabajo Legislativo- de la representante Boreal, con un salario de $9.2 millones de pesos. La formación de ese individuo es nula. No tiene título profesional; estudió algunos semestres y fue expulsado de la universidad. Su promedio fue de menos de 3 sobre 5. Un verdadero vago.
Para la Boreal -es normal que una mujer admire a su pareja, así sea un zángano- don Christhian David es una persona inteligentísima y con una gran experiencia. ¿Cómo se acreditó su trayectoria? Con una carta colmada de evidentes falsedades, suscrita por el exsenador y autor de novelas de baja factura Gustavo Bolívar.
En la misiva, fechada a comienzos de julio del año pasado -y que claramente fue hecha con el fin de “acreditar” la experiencia de Guzmán para lograr su vinculación en el Congreso de la República- se lee que la pareja de Susana Boreal “fungió como mi asesor político entre abril 05 de 2016 y junio 30 de 2019, sus labores asignadas de forma directa por mi y remuneradas de mi débito personal en forma de honorarios…”.
El abogado Daniel Briceño se dio a la tarea de revisar si efectivamente Guzmán Romero había realizado los aportes a seguridad social obligatorios, que se desprenden de los honorarios que Gustavo Bolívar aseguró haberle pagado.
No halló absolutamente nada. En palabras del abogado, “los más de 3 años de experiencia laboral certificados no aparecen cotizados en el sistema de seguridad social. Deben pagarle al país lo que le deben”.
La parlamentaria Boreal insiste en exaltar las calidades de su pareja/asesor. Lo pondera y valora porque en su momento, Guzmán fue asesor de algo que ella llamó “premios carroña”. Es una burla cínica al país. Ella no paga de su bolsillo el salario de la persona con la que se tira sobre colchones. Los más de $9 millones de pesos mensuales que gana el mediocre Christhian Guzmán salen de los impuestos de los colombianos.
Y hablando de carroña, lo que hasta ahora se ha visto de buena parte de la gavilla petrista es que ellos, cual carroñeros, se han dedicado a devorar el presupuesto público en estos pocos meses que llevan en el poder.
Publicado: febrero 27 de 2023
Es que definitamente estsmos llevados por esta cantidad de CARROÑEROS PETRISTAS, incluidos Gustavo Bolivar