Reforma tributaria para que sigan robando

Reforma tributaria para que sigan robando

Regularmente, los presupuestos generales de la nación son aprobados sin mayores sobresaltos cuando son presentados ante el Congreso de la República. Se trata de un procedimiento meramente automático.

En el gobierno de Petro ha sucedido lo contrario. Para los años 2024 y 2025, los presupuestos generaron y generan serias dudas sobre su financiación. El del próximo año, que debe ser aprobado en las semanas venideras, presenta un vacío de $12 billones de pesos. 

El oscuro ministro de Hacienda, involucrado hasta la coronilla en el escándalo de la UNGRD, muy campante ha dicho que el gobierno propondrá una reforma tributaria para superar el déficit.

En palabras sencillas: gravar a los ciudadanos para que sean ellos los que saquen de su bolsillo el dinero que el petrismo se ha robado y planea seguir robando el año entrante.

La falta de rigor en el manejo de los recursos públicos es pavorosa. Petro y los suyos están utilizando el tesoro nacional como si fuera un botín propio. El saqueo ha sido permanente y descarado.

Y angustia que la justicia, en este caso concreto la fiscalía general de la nación, se haya convertido en cómplice de la corrupción. Ni uno solo de los funcionarios involucrados en el robo que se perpetró a través de la UNGRD ha sido imputado, a pesar de las pruebas y las confesiones entregadas por Olmedo López y su lugarteniente Sneyder Pinilla. 

El asunto, aparentemente, fue zanjado con las renuncias de Sandra Ortiz y del peligroso Carlos Ramón González, exjefe de la policía política petrista. La fiscal Camargo, llena los requisitos para recibir el título de ‘fiscal de bolsillo’ del gobierno. Solo falta que decida trasladar su oficina a la Casa de Nariño, donde le será más fácil recibir los dictados e instrucciones del presidente. 

La situación económica de Colombia en 2025 será pavorosa. Ecopetrol, principal generadora de ingresos de la Nación, va en caída libre. Los empresarios, que están con el agua al cuello por cuenta de las políticas socialistas del régimen, serán duramente castigados con la reforma tributaria que presentará y seguramente logrará aprobar el corrupto ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla. 

Resulta indignante lo que pretende hacer el gobierno. Eso de aumentar los tributos para nutrir las fuentes de corrupción es perfectamente asqueroso. Lo más aberrante es que la reforma será aprobada por unos congresistas a los que el gobierno ha corrompido y seguirá corrompiendo. 

@IrreverentesCol

Publicado: agosto 26 de 2024