Pelea de tramposos

Pelea de tramposos

Santos y el exnarcocanciller Leyva se cruzan mensajes. Leyva delata al expresidente y lo señala de haber firmado el acuerdo con la banda terrorista Farc sin haberlo leído, sindicación que muy posiblemente sea cierta. Santos estaba enfocado en lograr el Nobel de Paz y para ello pagó un elevadísimo precio que se tradujo en la demolición del estado de derecho colombiano. 

El acuerdo de La Habana fue rechazado popularmente. Lo que Santos hizo aprobar por el Congreso, y que ahora cacarea ante el secretario de las Naciones Unidas, es absolutamente espurio. 

Se trata de un documento ilegítimo cuya implementación se está haciendo por fuera de la ley. La mayoría ciudadana votó por el NO y ese resultado fue criminalmente desconocido por Santos y sus conmilitones de entonces, entre ellos el oscuro Álvaro Leyva Durán, un profesional del delito y de las trampas. 

Una de las razones por las que el acuerdo fue negado por la ciudadanía era, precisamente, porque en ese maremágnum de paginas se escondía la clave para hacer una cantidad significativa de trampas y maniobras, como la que ahora pretende impulsar Leyva para perpetuar a Petro en el poder. 

Si la supuesta habilitación para convocar una constituyente a través de un decreto es tan clara y evidente como sostiene el exministro, ¿por qué hasta ahora él lo dice? ¿Por qué no lo planteó cuando empezó el gobierno de Petro? 

Está claro que Leyva Durán está engañando, mientras intenta barnizar la ilegalidad que está cocinando el gobierno socialcomunista colombiano. 

Y ahora Santos, el autor de todo el daño, no puede posar de víctima ni mucho menos mostrarse sorprendido o indignado. Además de haber ayudado a elegir a Petro, él es directo responsable de todo el mal que ha vivido Colombia desde que se firmó el acuerdo con las Farc y, cómo no, será uno de los grandes culpables de las barbaridades que hará Petro para perpetuarse en el poder, alegando la implementación del tal acuerdo con los terroristas por parte de su gobierno. 

El pueblo colombiano históricamente ha sido desmemoriado. Tiene una increíble capacidad para olvidar a los políticos que le ha hecho daño. 

Santos es el autor de las peores felonías que se han cometido contra los ciudadanos y por eso debe ser repudiado. Lo que haga o deje de hacer no debe ser asumido como una acción de buena fe, porque todo lo que emane de apesta a trampa y a traición.

@IrreverentesCol

Publicado: junio 5 de 2024