La sarcopenia se caracteriza por debilidad muscular, fatiga, fragilidad y pérdida de la masa muscular. El paciente refiere “estar sin fuerza” y aparece por el enlentecimiento de los procesos oxidativos y la opacidad de la actividad hormonal. Cansancio permanente y dificultades para caminar. Se especula que una de sus causas centrales es disminución de la serotonina en el hipotálamo. Se asocia a la falta de ejercicio físico. Recordemos las proteínas y la glutamina, sintetizada en el hígado, se considera no esencial. Los otros aminoácidos esenciales, constituyen la tercera parte y ser toman regularmente con la dieta. Quizá uno de los alimentos recomendados es la ingesta de atún (Vit A adicional), pescado rico en Omega-3que combinado con el ejercicio físico es la mejor prevención de este trastorno. Hay que buscar enfermedades crónicas, diabetes y osteoporosis, que facilitan su aparición. Tenga presente que después de los 40 años se pierde 1% de masa muscular anual.
Una de las diferencias entre el reino vegetal y animal es la capacidad de movimiento. Las plantas solo sobreviven si están cerca de un terreno fértil o de los cuidados que le permitan acceder a los nutrientes. El animal puede desplazarse y buscar lejos de su casa la alimentación deseada. Esta es la esencia del ejercicio físico: la expresión de esta particularidad. Es repetir determinados movimientos con el propósito de mantener una salud física que impacta sobre la salud mental. Según la OMS es estructurada, repetitiva y programada. Mejora las habilidades de aprendizaje, razonamiento y juicio. Resultados de supervivencia se mejoran y en los pacientes con cáncer quienes hacen ejercicios la expectativa de vida se supera en un 40%.
El ejercicio físico libera endorfinas y aumenta la circulación sanguínea. Hay que tomarlo como un habito o un ritual. Mejora la calidad de vida y la longevidad. Muchas veces necesitamos un instructor, pero caminar a pasos largas, repetidos y programados es una gran ayuda. Es el mejor ejercicio cardiovascular que tenemos disponible y un soporte para la longevidad. Hay genes que se pueden determinar en laboratorios: el, ACTN3, gen de la velocidad y susceptible de transferir al organismo es una muestra de ellos. Con el ejercicio se disminuye el estrés oxidativo, se aumenta el consumo de grasas, se mejora la vascularización miocárdica y se disminuye la tendencia de ateromas en las arterias coronarias. La esperanza de vida en los grupos muy malos, cuando pasan al grupo malo mejora en un 20%. Los pacientes con sobrepeso inaceptable pueden dividir su expectativa entre dos y este es el resultado múltiples estudios de seguimiento.
Sobre el aparato osteoarticular es significativo; mejora sus movimientos y su flexibilidad. Evita y previene la aparición de fracturas. Contribuye y ayuda a mantener la posición del cuerpo. Es una gran medida para la postura corporal. Los beneficios sobre el estrés son notorios: la liberación de hormonas y especialmente encefalinas ayuda a mantener la sensación de bienestar y plenitud. Si el ejercicio lo practicamos durante el día tendremos un mejor sueño.
Los efectos cognitivos del ejercicio debemos entenderlos y reconocerlos. La calidad del pensamiento, el razonamiento y aprendizaje se activan. En historia familiar de Alzheimer aconsejamos a los parientes practicarlo especialmente el baile. Se fomenta en forma integral la concentración, el equilibrio, la agilidad y se aprovecha el efecto relajante de la danza.
La actividad física previene el deterioro cerebral cognitivo, disminuye el riesgo de desarrollar demencia y ayuda a los pacientes a su control. Entre los neurotransmisores que se liberan durante el ejercicio señalamos FNDC (factor neurotrófico derivado del cerebro) estructura que promueve el crecimiento neuronal. Los estudios han demostrado que el cerebro no es unidireccional y que la integración con el sistema motor es la clave. Regenera neuronas, calma inflamación y mejora el lenguaje interneuronal. El impacto del ejercicio en el cerebro es multifactorial.
Diptongo:15% se aumenta la esperanza de vida y suma 3.5 años más de supervivencia. La mejor medicina.
Publicado: junio 21 de 2024