Un hombre sin cultura sufre mucho, Álvaro Gómez Hurtado.
Hanna Arendt, 1906 – 1975, fue una teórica política alemana posteriormente nacionalizada norteamericana, de religión judía, sionista diría Petro, siendo considerada una de las filósofas más influyentes de su tiempo. Dentro de sus estudios relevantes se encuentra la Condición Humana, 1958, donde se pretende aclarar el cómo actúa el ser humano frente a determinadas circunstancias de la vida.
Arendt, plantea varias conclusiones.
La primera: no debemos sorprendernos por las actuaciones de los seres humanos, buenas o malas, porque esa es su condición.
Por ejemplo: no deberíamos sorprendernos de la actitud de Judas con respecto a su traición hacia Jesús; porque esa era su condición humana.
Como, tampoco, deberíamos sorprendernos por las actitudes del señor Petro frente al conflicto entre Israel y Palestina; porque esa es su condición humana.
La semana anterior, Petro produjo más de 100 publicaciones cada una más delirante que la anterior sin tener en cuenta el dolor que está sintiendo el pueblo de Israel por el demencial y sangriento ataque a su población causando la muerte de más de 1.000 seres humanos inocentes entre ellos niños, niñas, quemados, incinerados, quienes no tienen nada que ver en este conflicto que lleva prácticamente desde los comienzos de la historia de la humanidad.
Siendo todos hermanos, tíos, primos, sobrinos desde el origen; árabes, judíos, musulmanes y palestinos no han podido vivir juntos, en armonía y en paz desde el día uno de su existencia para que, ahora, el señor Petro genere aún más dolor al pueblo de Israel desconociendo por completo el ataque demencial producido por Hamas y la Yihad islámica, más radical que el mismo Hamas.
Petro, en medio de su delirium tremens se metió con el tema del sionismo – Monte Sion – origen del pueblo de Israel, desconociendo por completo el contexto.
Comparó la situación en Gaza con los campos de concentración Nazi, causando aún más dolor en contra de un pueblo quien como nadie ha sufrido la persecución de sus mismos hermanos desde Abraham.
Y, el canciller de las Farc, como lo llamaron en los computadores de Raúl Reyes, Álvaro Leyva, cuya arrogancia es doblemente proporcional a su altura, no se queda atrás.
Ni, una palabra por la joven Rubio asesinada cruelmente por el demencial ataque de Hamas.
Ni, una muestra de solidaridad para con el pueblo de Israel.
Muchas gracias, señor canciller de las Farc y de Hamas…
Colombia humana, ha quedado como paria ante el mundo.
Petro y el m19 se identifican con Hamas y la Yihad islámica porque esa es su verdadera condición humana.
Petro y el arrogante e indolente canciller Leyva sufren mucho porque son unas personas asincrónicas con su tiempo, sin cultura, sin el sein, ni el desein (AGH:1998).
Y, para rematar, doña Francia Márquez dice que combatirá la corrupción dentro del ICBF, ahora que Garavito está muerto, pero no dice nada del incremento patrimonial en menos de un año de su jefe de seguridad.
Así, estamos.
Puntilla: En el caso de Petro, como diría Arendt: nos adentramos en el estudio de un sociópata: aquella persona que goza con el dolor ajeno, como lo es Petro en el caso de Israel y muchos otros.
Rafael Gómez Martínez
Publicado: octubre 17 de 2023