Como decía mi abuela Petrona Gómez, una mujer de carácter recio y vehemente: Más vale una verdad que duela, que una mentira que ilusione: torero Fandiño, 13 de mayo 2014, plaza de toros de las Ventas, Madrid.
Continua con una rapidez inusitada el desajuste moral, político, económico y social del desgobierno de petro caos con el apoyo del partido conservador y la clase política en general, con muy contadas excepciones.
De tal forma que la semana pasada apareció el comentarista Pirry quien hace parte de ese selecto grupo de pseudo intelectuales de estrato 5, artistas y demás de la gauche du caviar et le champagne, que llamó Ravel, quienes no le perdonaron una sola al gobierno anterior de Iván Duque.
Por lo menos, en el caso de Pirry – hago la aclaración que nada es personal – aparece como el primer arrepentido oficial de votar por Petrosky.
Sostiene estar desilusionado por darse cuenta que todo sigue igual o peor en cuanto a las costumbres políticas se refiere.
Tal vez, lo que más duele es ver la foto del ex presidente Álvaro Uribe Vélez con Petrosky.
Y ver cómo concuerdan en todo.
En eso, tiene razón, pero de malas.
Pirry, no es el único desilusionado arrepentido.
Quienes siempre creímos que en Álvaro Uribe Vélez se encontraba nuestra contención al comunismo, nos vemos desilusionados por su falta de coherencia, vehemencia y carácter en estos momentos.
Pirry, podría decirme: de malas, Rafael.
El escolta Andrés Trigos Vanegas, entró en paro cardiaco por los graves impactos de bala recibidos y heridas causadas por un artefacto explosivo en vía Rio de Oro.
Alcanzó a grabar un video despidiéndose: adiós, muchachos, compañeros de mi vida.
Trigos, ya no puede decir de malas.
El policía asesinado, degollado, por manifestantes en Caquetá en el pozo petrolero de la Emerald se llamaba Ricardo Arley: dejó dos hijos.
Ricardo Arley, ya no puede decir de malas.
Ceci, como víctima de las FARC en la cámara de representantes: Crecí víctima del abuso sexual.
Ceci, miembro de la corporación Rosa Blanca, no solamente fue violada por los miembros de las FARC, hoy en el congreso, sino que le violan sus derechos.
Hoy la callaron, mientras los victimarios, as, decían que ellos ellas eran las víctimas, según, Steph Bates, Prensa.
Ceci, no puede decir de malas.
El ministro de defensa Velásquez en silencio, cada vez más parecido al peligroso Tarek El Aisami, sigue con su purga interna en las fuerzas militares.
Ellos, porque en eso si no hay equidad de género, los militares purgados, tampoco pudieron decir de malas.
La corcho no se queda atrás, como diría el ministro Osuna.
¡Ah! Esa, es otra: los narcotraficantes podrán quedarse con su fortuna.
No van decir de malas, sino de buenas.
Y, el arrogante ministro Leyva: Pueden incendiar a Colombia si quieren…
Y la filósofa ministra de minas alcanzó su objetivo antes del tiempo ordinario, compañías petroleras solicitan cancelar los contratos de explotación…
Por lo anterior, el discurso consistente en que los dueños de las fincas en Colombia no dejaron prosperar el cambio se quedó sin piso.
Porque los verdaderos dueños de esa finca, que llama Pirry déspotamente, son las diferentes formas de lucha, eje del mal, que se tomaron el poder mediante las estructuras criminales con las cuales hicieron el pacto de la picota para llegar a la casa de Nariño.
Si Colombia no reacciona con vehemencia ante el desajuste moral, económico, social y político que nos está conduciendo el desgobierno del petro caos, nadie podrá decir de malas…
Puntilla: Y, la reforma laboral será la bomba atómica…
Rafael Gómez Martínez
Publicado: marzo 21 de 2023