No es difícil prever el melodrama que se desataría si en una de las sedes políticas del candidato socialcomunista Gustavo Petro aparece un dispositivo de espionaje como el que fue hallado en una de las oficinas de ‘Fico’ Gutiérrez.
Tan pronto se conoció la noticia, desde los cuarteles petristas se puso en marcha una estrategia de desinformación tendiente a poner en duda la autenticidad del aparato descubierto, sin siquiera esperar a que las autoridades hablaran.
Uno de los más activos en esa campaña fue, cómo no, el bloguero Daniel Coronel quien cumplió a pie juntillas las instrucciones de la campaña petrista.
Lo cierto es que la policía determinó que efectivamente sí se trataba de un aparato para oír y tomar imágenes. ¿A quién le interesa saber lo que sucede en la oficina de Gutiérrez? La respuesta salta a los ojos de todos. Y las sospechas aumentan por cuenta de la reacción desproporcionada de los principales agentes del petrismo. ¿Se sintieron agarrados en su fechoría?
Más allá del hecho puntual, que de suyo es tremendamente grave, está el trasfondo que delata el talante criminal de esa corriente política cuyas muestras de violencia e intolerancia son permanentes. Un posible gobierno de Petro significará persecución despiadada a los opositores, utilizando todas las herramientas posibles. Habrá espionajes como el que le han hecho a la campaña de ‘Fico’ Gutiérrez, pero también hostigamientos desde distintos frentes. Periodistas al servicio de esa causa, que serán atosigados con pauta oficial, se encargarán de hacer los respectivos montajes en los que son expertos. Seguirá la persecución judicial. Uno de los abogados del petrismo, el oscuro Miguel Ángel del Río -que sueña con ser fiscal general- ofrece a través de su cuenta de Twitter encarcelamientos a diestra y siniestra.
Y todo seguirá siendo encubierto por esa asquerosa máquina de propaganda petrista que no tiene límites, que amplifica las falsedades, que desata cadenas de insultos y acosos en las redes sociales, que soborna periodistas, que difunde falsas noticias y todo lo demás que sea necesario para limpiar la cara del maniático que está ad portas de ganar las elecciones presidenciales venideras.
Así han operado y así continuarán haciéndolo porque, hay que reconocerlo, la estrategia les ha resultado tremendamente eficaz.
Publicado: mayo 19 de 2022
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