Como están las cosas, con el preocupante panorama de las encuestas, no se puede descartar a un candidato como Germán Vargas Lleras. La única prioridad es derrotar a Gustavo Petro y se debe acudir a cualquier medio para lograrlo. El contexto no está fácil y más con las erráticas decisiones de las últimas semanas que dificultan un camino que es ya de por sí bastante complejo.
En primer lugar, es una estupidez que una minoría del Centro Democrático, desconectada de la realidad, pretenda impedir que los militantes voten en la consulta del Equipo por Colombia. Eso lo único que logra es fortalecer a Petro y debilitar políticamente cualquier chance de la centro-derecha de llegar a la Casa de Nariño.
La consulta hay que votarla independientemente del candidato al cual se apoye. Más que nombres, lo fundamental es demostrar la fuerza electoral que respalda esta visión de País.
En segundo lugar, más temprano que tarde Óscar Iván Zuluaga deberá renunciar a su candidatura. Está preparado, conoce al Estado y tiene una agenda programática bastante interesante. Fue un excelente Ministro y tiene la experiencia que tanto se requiere. Sin embargo, no es su momento. El contexto actual del País no es el mismo del 2014 y no darse cuenta de eso puede costar demasiado.
Él acarrea a sus espaldas el desgaste natural que genera gobernar y, a pesar de no ser el candidato de Palacio, es imposible que el electorado lo desvincule de un Gobierno que no logró conectar con la gente y que tiene la favorabilidad por el piso.
De hecho, su permanencia hasta primera vuelta generaría una innecesaria fragmentación de votos que solo beneficia al Pacto Histórico. Esos 7-8 puntos porcentuales que hoy marca en las encuestas pueden terminar siendo decisivos para que haya o no una segunda vuelta.
En tercer lugar, es la hora en que ningún candidato ha logrado contrarrestar a Petro. Fico nada que despega, a Fajardo le falta fuerza, Char difícilmente conquistará los votos del interior y Rodolfo Hernández es una incógnita, más aún después de designar como fórmula vicepresidencial a una profesora completamente ajena a la política que no tiene la menor idea de cómo se administra el Estado. Puede que el panorama cambie una vez se conozca el resultado de las consultas, pero lo cierto es que hoy Colombia afronta un inmenso peligro.
Y es aquí donde no se puede descartar a Germán Vargas Lleras. La persona más preparada para ser Presidente, con una probada capacidad de ejecución, carácter de sobra para atacar las mentiras de Petro y que puede cambiar por completo el panorama electoral.
Sobretodo, en un momento donde el pragmatismo debe primar sobre cualquier diferencia del pasado. El País necesita un líder fuerte, conocido, que agrupe a la mayor cantidad de sectores posibles y que no se lance para aprender en el camino.
Solo el tiempo dirá si las decisiones del presente fueron las correctas o no. Lo cierto, es que los intereses del País deben primar sobre cualquier coyuntura particular. La estabilidad de las instituciones y el modelo económico están en juego y todas las opciones deben estar sobre la mesa.
Publicado: marzo 8 de 2022
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