Todos los estudiantes de pregrado de la Universidad del Magdalena volvieron a ser engañados por el jefe del Clan Caicedo, Carlos Caicedo. Esta semana, los jóvenes magdalenenses fueron testigos de un nuevo episodio de trampas, artimañas y engaño con el programa de gratuidad.
En vez de honrar su palabra, Carlos Caicedo, jefe del Clan Caicedo; anunció la asignación de multimillonarios recursos para costear un beneficio que el interesado ahora recibirá en la Universidad Abierta y a Distancia -Unad- y en la Institución Universitaria Digital de Antioquia -Iud-.
Mientras por un lado se ufana de haberse desempeñado como rector entre 1997 y el 2006, por el otro, el jefe del Clan Caicedo, Carlos Caicedo; demuestra que poco o nada le interesa lo que suceda con el proyecto de vida que nuestros jóvenes buscan hacer realidad estudiando.
No tengo ningún reparo con el hecho de que se ofrezcan beneficios a través de la Universidad Abierta y a Distancia -Unad- y en la Institución Universitaria Digital de Antioquia -Iud-, pero son centros educativos ajenos al Departamento y carentes de Acreditación por Alta Calidad.
La Universidad del Magdalena es un orgullo para todos nosotros. Robarle a nuestros jóvenes la posibilidad de formarse en una institución que los representa, es una infamia. Amañar el programa de ‘Matrícula Cero’ por físico resentimiento, es un acto soberbio y mezquino.
Mejor ejemplo han dado los alcaldes quienes sin tener el presupuesto de la Gobernación, firmaron convenios con la Universidad del Magdalena para que sus jóvenes estudien gratis. Y eso que Carlos Caicedo, jefe del Clan Caicedo; ha querido estigmatizar a los mandatarios municipales.
La Universidad del Magdalena también hizo lo que le correspondía al aprobar un alivio correspondiente al 50 % del valor de la matrícula neta con aportes del Fondo Solidario para la Educación del Gobierno Nacional y con la reducción de gastos de funcionamiento propios.
La manera como el jefe del Clan Caicedo, Carlos Caicedo; desfalca la gratuidad ofrecida a los universitarios magdalenenses prueba que no tiene voluntad para hacer equipo, que su narcisismo es más peligroso que la pandemia de COVID-19 y otra característica de su extremismo político.
Publicado: febrero 25 de 2021