Pareciera que el famoso episodio litúrgico cuando el pueblo le grita a Poncio Pilatos que suelten a Barrabás, en detrimento de la posterior crucifixión de nuestro señor Jesucristo, se estuviera repitiendo en el episodio del juicio en contra del senador y expresidente Álvaro Uribe Vélez en la Corte Suprema de Justicia.
El origen de la indagatoria al expresidente AUV se da en el contexto de un fuerte debate que se produjo en el Congreso de la República entre los senadores Cepeda y Uribe. Cepeda, formuló duras acusaciones contra Uribe y su hermano de estar involucrados en acciones con grupos paramilitares, además de la creación de las AUC.
A su vez, Uribe, ese mismo día, denunció al senador Cepeda por promover falsos testigos en su contra ofreciendo beneficios jurídicos y económicos, medidas cautelares, ubicación en el exterior a través de la figura del asilo político.
La CSJ se demoró siete años para tomar una decisión consistente en darle un giro a el caso. En efecto, el 16 de febrero del 2018 la CSJ, por un lado, precluyó la investigación contra el senador Cepeda. A su vez, compulsó copias al expresidente Uribe por soborno y fraude procesal.
Todo este escenario se da en medio de las denuncias formuladas por el senador Uribe quien posee el record de chuzadas por error, como lo reconoció la misma CSJ. Chuzadas que han servido para sendos artículos de Daniel Coronell en contra de AUV y su noticiero hoy en quiebra de Noticias Uno, violando lo que se conoce como la reserva sumarial.
Uribe, comentó que fue Cepeda quien visitó más de 21 veces al testigo clave del caso, Monsalve, ofreciendo el oro y el moro. Además, Uribe cuestionó a la CSJ de no escucharlo en versión libre previo a la audiencia del 8 de octubre pasado.
Al mejor estilo de Poncio Pilatos, la CSJ puede lavarse las manos tomando dos decisiones. La primera, precluir la investigación en contra del expresidente AUV, así como lo hizo contra el senador Cepeda, quedando en tablas como en el ajedrez donde nadie ganó, ni perdió, y todos tranquilos.
Pero, también, puede tomar la decisión que tiene en ascuas al país al mejor estilo del pueblo quien decidió crucificar a Jesucristo en detrimento de Barrabás.
La CSJ puede crucificar al senador Uribe con una serie de medidas contundentes las cuales exigen medida de aseguramiento, con la prohibición de salir del país, o, ordenar que el senador quede en libertad para que cumpla con su proceso judicial.
Todo este escenario se da, por lo demás, en medio de la creación de los grupos de choque de las universidades públicas, M-19, quienes hacen lo que se les viene en gana en detrimento de la Fuerza Pública y el Esmad quienes, a su vez, ven impotentes cómo la juventud ha decidido apoyar a Barrabás para quedar crucificados en medio del cuestionamiento de los medios de comunicación junto con su crisis de ética periodística Vs. la debilidad del Estado para ejercer la autoridad como debe ser.
Los malos, Barrabás, terminaron siendo apoyados por el pueblo, los jóvenes universitarios, ante lo cual deberíamos cuestionar la educación en valores de lo que se conoce como el marxismo cultural.
Por el bien de todos, sería conveniente dar por terminado este episodio judicial el cual tiene un solo objetivo: llevar a Uribe a la cárcel.
De suceder ello, la CSJ debería tener en cuenta lo que está aconteciendo en Ecuador donde mitad de un pueblo, los barrabás, tienen incendiado al país en detrimento de Lenin Moreno quien trata de llevar al país por los caminos diferentes al Socialismo del siglo XXI.
¿Qué decisión tomará la CSJ? ¿Se lavará las manos o decidirá incendiar al país llevando a Uribe a la cárcel?
Mientras exista la mitad del país urbano, joven, junto con Cepeda y el senador decente Bolívar que desea ver a Uribe en la cárcel vs el país de la provincia quien vio como Uribe lo defendió en contra de las Farc y sus diferentes formas de lucha, no habrá paz en Colombia.
Entonces, estaremos viendo cómo sueltan a Barrabás en detrimento de Uribe, Jesucristo, con una monumental lavada de manos de Pilatos, CSJ, ante cualquier decisión que se tome.
¿Nos encontraremos ante un país inviable donde la Justicia pareciera que actúa en favor de los criminales en detrimento del ciudadano de bien, de a pie, como bien lo comentó Álvaro Gómez Hurtado cuyo caso sigue en la impunidad?
Un país sin Justicia, es un país sin esperanza. Pero, un país con la Justicia como se encuentra, es inviable a futuro.
Puntilla: Mientras tanto, Santrich, el de las gafas, sigue siendo congresista, ahora con fusil al hombro. La Justicia en favor de los criminales.
Publicado: octubre 15 de 2019
3.5