Originada en una denuncia presentada por la Red Nacional de Veedurías, se investiga si en Valledupar copiaron el modus operandi de la reelección de Juan Manuel Santos; es decir, si a través de movimientos entre contratistas públicos se simularon negocios privados para pagar coimas, o financiar indebidamente campañas políticas.
En el caso de Valledupar los hechos y su línea de ocurrencia en el tiempo, demostrarían que algo muy turbio se empezó a gestar desde que se anunciaron públicamente varios proyectos de contratación en esa ciudad.
El entonces diputado – hoy candidato a la alcaldía de la capital del Cesar – José Santos “el mello” Castro González, en su condición de miembro de la duma departamental, sacaba pecho en sus redes sociales firmando como “garante” para que se iniciaran los estudios y diseños de varios proyectos que serían a la postre ejecutados por el alcalde de la capital cesarense; entre ellos, mencionaba el orgulloso diputado, la remodelación de la Plaza Alfonso López.
El proyecto anunciado por el mello Castro González (diputado) se convirtió en un multimillonario contrato que se adjudicó en $8.700 millones de pesos, tuvo adiciones de más del 20% y terminó costando casi $11 mil millones de pesos de los vallenatos.
Lo que había permanecido oculto y que ahora viene a salir a la luz pública, es que el día 18 de junio de 2018, el contratista al que se adjudicó el millonario contrato “cedió todos los PAGOS” que le correspondían por la ejecución del mismo y en el contrato de cesión, dejó claro que cedía “únicamente” los derechos económicos a su favor pero ninguna de sus obligaciones; es decir, el contratista seguía obligado a reconstruir la Plaza Alfonso López de Valledupar y a cambio no recibiría el pago porque lo cedió a un tercero.
Esa cesión de derechos, despertó algunas suspicacias, pues para la red de veedurías resulta intrigante saber ¿a quién le cedió la totalidad de los pagos el contratista de la Plaza Alfonso López?. La respuesta no deja de ser altamente sospechosa: a una empresa cuyo representante legal era José Guillermo “el Mello” Castro González, el hermano mellizo del otro Mello Castro González, quien para la época de la peculiar cesión -junio de 2018- aún seguía siendo diputado en ejercicio.
Así las cosas; mientras el diputado “mello” Castro sacaba pecho en sus redes por haber firmado los documentos que garantizaban los estudios y diseños para la multimillonaria Reconstrucción de la Plaza Alfonso López, su hermano, el empresario José Guillermo Castro, recibía como representante legal de una sociedad (Inversiones Taico SAS) , la cesión de todos los pagos generados por el contrato, en cuyo proyecto, intervino decididamente su hermano mellizo, el flamante diputado.
Meses después, el diputado renunció a su cargo y se lanzó como candidato a la alcaldía de Valledupar y, a la par, su hermano empresario renunció a la gerencia de la empresa beneficiada con los millonarios pagos del contrato de la Plaza Alfonso López y se convirtió en el gerente de la campaña a la alcaldía, de su mellizo.
No son pocas las preguntas que deben formularse los organismos de control:
¿Existe un acto de corrupción en la actuación de los mellos Castro cuando uno de ellos: José Santos, en calidad de diputado, intervino en la gestión del contrato público “Reconstrucción de la Plaza Alfonso López” (según lo publicó en sus redes sociales) y su hermano gemelo, José Guillermo, como gerente de una empresa, recibe la cesión total de los pagos que generó el multimillonario contrato?
¿A título de qué, el contratista que obtuvo el multimillonario contrato a través del que se cedió la totalidad de los pagos a una empresa gerenciada por el hermano gemelo del Diputado que anunciaba en sus redes la gestión como garante de ese proyecto?
¿Quiénes son los socios de la empresa Taico SAS?
¿Gestionaron los mellos Castro González negocios que se han ejecutado por y en la administración municipal de Valledupar ? ¿Está, por cuenta de esa gestión de negocios, inhabilitado el mello Castro para ser candidato a la alcaldía de Valledupar?
¿Los pagos del contrato de la Plaza Alfonso López, cedidos a través del Mello empresario, hoy gerente de la campaña del Mello candidato, han financiado esa campaña?
El modus operandi del caso de financiación ilegal de campañas se parece mucho al de Odebrecht, en Valledupar. La diferencia está en que se denunciaron los hechos antes de las elecciones.
Publicado: octubre 16 de 2019
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