Somos muchos los caleños ilusionados con el renacer del centro de Cali, ver nuestros ciudadanos utilizar el espacio público, correr por el Bulevar del rio, el nuevo parque lineal, tomarse un café en la zona o ser testigos de la apertura de nuevos bares y restaurantes. Todo lo anterior da la sensación de que como caleños estamos empezando a creer en nuestro centro, su potencial y el deber que tenemos, no solo para conservarlo sino para transformarlo.
Nuestro centro es un polo de desarrollo, pero necesitamos organizarlo. Hoy encontramos grandes obstáculos que merecen toda nuestra atención: la movilidad, la seguridad, los vendedores ambulantes y la ocupación del espacio público, son problemas visibles y evidentes de cara al aprovechamiento de esta zona. Y es aquí cuando empiezan los interrogantes de cómo solucionarlos para emprender una ruta que nos permita acelerar el aprovechamiento de este valioso espacio comercial, cultural e incluso histórico que tenemos todos los caleños.
Pero empecemos a analizar algunos de los problemas: el primero de ellos es la ocupación del espacio público por la masificación de vendedores ambulantes. En 2003 la Corte Constitucional falló a favor de los vendedores ambulantes, ordenando a los municipios a otorgar condiciones para el trabajo de estos y desestimando el hasta entonces delito de ocupación del espacio público. Este fallo, de alguna forma u otra, incentivó la presencia masiva de vendedores ambulantes. Lo cierto es que esta problemática desencadena en otras. La movilidad se ve reducida, para no decir que no se puede caminar, por la proliferación de ventas. La inseguridad aumenta gracias al desorden reinante. En ese gentío que deambula, se genera el escenario propicio para el carterista y otros malandrines. Es muy dificil ejercer la autoridad, disuadir al criminal y trabajar en la prevención de hurtos. Esta lamentable situación, afecta tanto al comerciante formal, como al informal, pues el caos y los negocios rentables no la van tan bien.
Lo cierto es que debemos afrontar de fondo y de manera estructural esta situación, pues se está poniendo en riesgo no solo el futuro del comercio formal, sino tambien el de nuestros vendedores ambulantes. Debemos trabajar en una solución integral a que les permita a ellos mantener sus ingresos, pero al mismo tiempo iniciar un proceso hacia la formalización. Debemos encontrar la manera de construir un proceso de reubicación exitoso y efectivo que les genere confianza, puesto que muchas de las políticas públicas desarrolladas hacia ellos han tenido resultados fallidos, principalmente porque los espacios de reubicación han reducido sus ingresos, lo que los incentiva a regresar a la calle.
El segundo problema que debemos análizar es la inseguridad, un problema que incluso es reconocido por vendedores ambulantes y que los afecta a ellos y al comercio formal ubicado en el centro de la ciudad. Es necesario aumentar la presencia policial en este sector de la ciudad y generar programas que permitan atacar de manera directa los focos de microtráfico, prostitución y delincuencia que giran alrededor de esta zona. Para ello se necesita toda la voluntad política de la administración municipal, pero también el apoyo de los comerciantes y la ciudadanía que recorre día a día las calles del centro y conoce los puntos más algidos de la ciudad.
Por último, la movilidad es una condición que hace difícil el acceso a este centro de comercio y sobre la cual se debe trabajar. Es un punto que se ve agravado precisamente por la invasión del espacio público, que impide la libre circulación de carros y motos, y obliga a los peatones a caminar por las vías vehiculares. Por esta razón las soluciones deben ser integrales.
Debemos Pararle-Bolas a nuestro centro, un foco de oportunidades comerciales, turísticas y de desarrollo en general, cuya recuperación y reestructuración debe dejar de ser un sueño, para convertirse en una realidad que aporte al embellecimiento de la ciudad. Hacemos un llamado a todos los candidatos que aspirarán a ocupar la Alcaldía de Cali, a poner un foco especial de atención sobre esta problemática.
Publicado: febrero 18 de 2019