“El mundo entero se aparta cuando ve pasar a un hombre que sabe adónde va.” Antoine De Saint – Exupéry
Se que me lloverán rayos y centellas como nos decía mi madre, pero me encantó el discurso del presidente del congreso Ernesto Macias, Colombia necesitaba un recuento crudo del país que este gobierno recibe, fue una pieza contundente del triste legado de Juan Manuel Santos y mostró a la comunidad internacional embaucada, un rostro de la verdad. Triste la reacción de los enmermelados, pero obvia, se les acabó el reinado. Liberó de paso al presidente de tener que hacer el balance de donde arranca su gestión.
El dicurso de Duque magistral, valiente, claro, conciliador, puso los puntos sobre la íes con prudencia, dejó claro que conoce el país y sus problemas, no pronunció un discurso para la galería preparado por un tercero como usualmente se estila. Defendió lo prometido en su campaña. Empezó el baile con el pie derecho.
Su visita a San Andrés pone cosas en su sitio, le deja claro al patán de Nicaragua que la soberanía no se regala y que las desiciones salomónicas de la excanciller Holguín, no son tan salomónicas. No se si será posible la recuperación de los setenta y cinco mil kilómetros cuadrados que la Corte de la Haya nos despojó, pero quedará claro que San Andrés nos pertenece y nuestra posesión de la isla no se discute, como tampoco se discutirá la plataforma continental de Cartagena. Y empezó su gobierno por un territorio casi abandonado.
Su primer periplo sigue por donde hay situaciones álgidas: El Catatumbo, Tumaco y uno menos grave pero emblemático, Girardot. Escuchar a la gente es la mejor forma de acometer las soluciones que se necesitan.
A las cortes les debió quedar claro que sus desiciones deben ser en derecho y no políticas.
Los terroristas también debieron entender que, en adelante, como claramente lo dijo Duque en su discurso, los delitos de narcotráfico y secuestro no serán conexos; que las víctimas deben ser reparadas, que tienen derecho a conocer la verdad, no la del padre De Roux, y tendrán que garantizar la no repetición de sus crímenes. Adiós al quizas… quizas… quizas… del señor ‘Santrich’.
El Eln por tirárselas de duro, como ha sido su costumbre, no aprovechó la flojera de Santos para obtener mayores beneficios. Ahora les quedará más cuesta arriba, seguramente deberán abandonar sus fechorías para que se les acepte negociar, no podrán aspirar a los delitos “conexos” de que gozaron sus amigos de las Farc y quien sabe a que más deberán renunciar. Afortunadamente su terquedad, o la de ‘Antonio García’ que siempre a quemado el pan en la puerta del horno, no le permitieron a Santos firmar otro papelito a cualquier precio.
Las EPS tendrán que ponerse las pilas, abandonar la tomadera de pelo con las citas médicas, el suministro de medicamentos y cumplir oportunamnte con sus obligaciones so pena de desaparecer.
La agricultura retomará su camino recobrando la seguridad jurídica, desaparecida en La Habana, para que puedan convivir las explotaciones agroindustriales con las campesinas y a ambos se les respeten sus derechos.
Esto es solo una parte de la nueva esperanza que en el país se vislumbra.
El rincón de Dios
“Amarás al Señor tu Dios y en cada cosa
descubrirás su voz, su luz y su sombra
Cantarás cada día al levantarte,
sonreirás al tiempo que te crece adelante.
Al cruzar los umbrales de tu puerta un momento
detendrás la pisada y dirás que estás contento.”
Fragmento – Padre Calixto
Publicado: agosto 10 de 2018