Aunque se han escrito muchos libros y se han hecho películas y documentales sobre este tema en Latinoamérica, muy poco se ha tratado el caso colombiano. Esto es gracias a que, hasta ahora, hemos sido relativamente inmunes a este flagelo a diferencia de lo que ha pasado en muchos países de la región.
Si me pusiera a enumerar país por país los principales populistas, seguramente dejaría algunos por fuera; cosa injusta. El mundo debe saber quienes son y por lo tanto simplemente voy a recoger algunos de los mas representativos:
Juan Domingo Perón en Argentina
Lula da Silva en Brasil
Alan García en el Perú
Rafael Correa en Ecuador
Evo Morales en Bolivia
Hugo Chávez en Venezuela
Daniel Ortega en Nicaragua
Cada uno, con las diferencias normales por su personalidad o por sus países, tuvieron en sus gobiernos similitudes que en la mayoría de las oportunidades terminaron o siguen siendo catastróficas para la población.
Las principales características de sus gobiernos son:
- Tratan a toda costa de mantenerse en el poder, antes por las vías de hecho y hoy electoralmente. Se convirtieron en unos magos para manipular las elecciones y volver estas cada vez más oscuras.
- Abrazan todas las ramas del poder público y las ponen a trabajar bajo sus caprichos. Si antes lo hacían cerrando el Congreso y las Cortes por la vía armada, hoy las manejan con corrupción, contratos y dadivas.
- Silencian los medios de comunicación. No les gustan las críticas, ni que los estén vigilando.
- Aumentan el gasto público exorbitantemente, emiten billetes, se endeudan más de la cuenta, generan hiperinflación, piensan que el Estado debe ser el mayor generador de riqueza y de empleo; para eso estatizan y expropian compañías para controlar sectores de la economía que consideran estratégicos.
- Generan subsidios como base para la manipulación de las comunidades, así terminan manejándolas a su antojo.
- Les encanta el balcón. La mayoría de ellos son capaces de hablar horas y horas sin parar -sin decir nada- y mantener a la muchedumbre feliz.
- Su objetivo final es mantener la pobreza de la población. Ellos son consientes que si se acaba la pobreza pierden el poder.
Aunque en Colombia no hemos tenido todavía ningún gobierno de este corte, si hemos tenido personajes que encajan en el perfil. Afortunadamente, hasta ahora solo han llegado a tener poder en gobernaciones y alcaldías, pero estas elecciones pueden ser la vencida. Hay un candidato que cumple específicamente con las características del populismo y está segundo en las encuestas.
Gran parte de nuestro atraso en términos sociales, de la desigualdad tan grande que existe y del desempleo, han dependido de muchos factores como: la violencia que obliga al gobierno a utilizar una gran cantidad de recursos para combatir las guerrillas mientras que pudieron usarse en otros propósitos o la corrupción que ha permeado al país y le quita recursos a los más desfavorecidos por cuenta de unos pocos que se aprovechan, pero también hemos tenido el problema que hemos enarbolado algunas causas populistas que han desgastado al Estado, no han rendido frutos y si han dejado un hueco fiscal enorme.
Estas son algunas de las normas que tienen tinte populista y que hoy en día es poco para lo que sirven:
- Aunque nuestro salario mínimo no es el más alto, sí es uno de los que tiene más parafiscales. Hoy en día el costo de contratar un empleado es alto, por lo cual no fomentamos el empleo formal. Seguimos con uno de los desempleos más alto del continente.
- El impuesto del GMF o 4 por 1000, pasó de ser un impuesto temporal para salvar a la banca a uno permanente. Este es el gran responsable de la no bancarización de los colombianos. Con las tasas de interés de inversión actuales, este impuesto se recupera después del día 60.
- Mantener el sistema mixto pensional ha sido un error muy grande. El régimen de prima media en vez de ayudar a los menos favorecidos a tener una pensión más digna ha ayudado es a los que tienen pensiones altas a aprovecharse.
- Y -esta que no le va a gustar a muchos que la diga- las casas gratis. Soy un convencido que a las personas las cosas les deben costar para que las quieran. Adicionalmente, esta política sirvió para politiquear ya que es muy difícil entregar este regalo sin amiguismos y aprovechamiento.
Debe haber muchas más normas como estas, que no ayudan, pero sí estorban. Que generan inequidad y le ponen una tranca al desarrollo ¿imagínense cómo sería este país con un gobierno de corte populista?
Yo no lo quiero vivir.
Publicado: mayo 7 de 2018
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