El pasado domingo los colombianos nos manifestamos categóricamente en las urnas para expresar nuestro deseo de tener un mejor País, de recuperar la seguridad, la confianza, de fortalecer la inversión, las instituciones y volver a tener una política social estructurada, seria y financiable.
A pesar que nos robaron el plebiscito en el 2016, que el Gobierno le entregó una infinidad de concesiones injustificadas a la guerrilla y que durante 8 años nos hemos sentidos pisoteados por esta administración, el espíritu noble, valiente y firme que reposa en el corazón de todos nuestros compatriotas se expresó con contundencia para reclamar el cambio que con tanta urgencia necesita nuestra amada Colombia.
En el Congreso, de la mano del Presidente Uribe aumentamos nuestra representación, la cual permitirá que el nuevo Gobierno reestructure las falencias por las que atraviesa nuestro País sin necesidad de mermelada, contratos o cuotas burocráticas, sino centrado en un debate de ideas y propuestas.
Ahora, tras haber ganado el primer round de esta contienda electoral del 2018 es hora de cerrar filas y enfocar todos los esfuerzos en darle a la ciudadanía un Presidente honesto, preparado, inteligente, firme y capaz para dirigir las riendas de nuestra Nación: Iván Duque.
En lo personal, he tenido el privilegio de trabajar con él en el Congreso. Juntos, sacamos adelante la Ley que amplió la licencia de maternidad, la cual en su primer año de vigencia ha beneficiado a más de 283 mil madres y 286 mil niños, proceso en el cual pude evidenciar de primera mano el profundo amor que le tiene a Colombia y la firmeza y dedicación con que defiende las causas que considera justas en pro de todo el País y no centrado en unos pocos.
Además de la mencionada ley, los colombianos fuimos testigos de los grandes debates de control político que le realizó al Ministro de Hacienda, de las profundas deliberaciones acerca de la estructura institucional de la JEP y del empeño con que materializó los incentivos a las industrias creativas, potencial motor de desarrollo en las regiones, bajo la llamada Ley Naranja.
Iván Duque es un hombre con todas las capacidades para gobernar de la mejor manera a esta Nación. Le cabe el País en la cabeza, tiene las aptitudes necesarias para impulsar la economía colombiana a tal punto que se disminuya la carga impositiva, se creen reglas de estabilidad y seguridad jurídica y se disminuyan los índices de desempleo e informalidad.
El pasado domingo, más de 4 millones de compatriotas le dimos nuestro apoyo a su candidatura. Ahora, junto con Martha Lucía Ramírez, Alejandro Ordóñez y la gran coalición republicana que se forje para rodear a este gran hombre lucharemos incansablemente para ganar en primera vuelta, porque las nuevas generaciones de colombianos se merecen vivir en un País mejor y el indicado para lograr tal propósito es Iván Duque.
Publicado: marzo 16 de 2018