La semana que hoy empieza es crucial para el futuro del país y de quienes queremos participar en su construcción. En los próximos días conoceremos quién será el candidato del Centro Democrático a la Presidencia de la República, quiénes integraremos las listas de los distintos partidos al Congreso de la República y cuál será el desenlace parcial de las denominadas “Circunscripciones Especiales de Paz”.
A propósito del primer escenario, la lucha parece estar entre dos de los hombres de la contienda: Iván Duque y Carlos Holmes Trujillo. Si bien ambos son dignos representantes del uribismo, la mezcla entre juventud, preparación y dinamismo que personifica Duque, lo hace, en mi humilde criterio, la mejor opción. Lo importante es que, sin importa quién sea el ungido, todos los militantes del CD salgamos unidos a apoyarlo. Ojalá seamos capaces de poner atrás las rencillas pueriles que nos dejó la pre-campaña.
En lo que respecta al Congreso, el 11 de diciembre se cumple el plazo para inscribir las listas de los partidos ante las sedes de la Registraduría Nacional. El vaticinio, a estas alturas, es que el CD inscribirá una lista cerrada al Senado encabezada por el ex presidente Uribe, acompañado de sus alfiles más representativos y con una que otra figura nueva que seguramente refrescará el listado. Habrá más de uno inconforme por no haber sido incluido en la plancha o por no haber recibido el puesto que considera merecer, pero definitivamente no hay cama para tanta gente.
En las listas de Cámara, y particularmente en Bogotá, son más movidas las apuestas. Todo indica que la regla general para el CD será tener listas abiertas que, salvo contadas excepciones, pondrán a los candidatos a competir por obtener las mayores votaciones. Esto inyectará entusiasmo en las bases del partido que están ávidas, sobretodo porque son estructuras políticas nuevas, de “hacerse contar”. En lo personal, no le tengo miedo a las urnas y bailaré el son que me toquen.
El tercer asunto a resolver esta semana es el futuro de las 16 “Circunscripciones Especiales de Paz”, las cuales son objeto de una gran controversia porque el Gobierno insiste que, a pesar de haber sido declaradas archivadas por el Senado, éstas fueron aprobadas con un precario margen y deben pasar ahora a examen de la Corte Constitucional. Le corresponde al presidente del Senado, Efraín Cepeda, dirimir la controversia y proceder de conformidad, con la certeza de que cualquier decisión que tome será objeto de una avalancha de demandas. Conociendo al senador Cepeda, es previsible que apoyará la posición gubernamental y dará por aprobada la reforma constitucional.
Insisto, va a ser una semana crucial para el futuro del país y de quienes estaremos en el ruedo. Confiemos que los desenlaces finales sean los que más le convengan al país, al fin y al cabo los intereses superiores de la patria deben estar por encima siempre de cualquier otra consideración.
Como diría un prohombre de nuestra democracia, que en paz descanse, “lo que sea menester, sea”.
Publicado: diciembre 4 de 2017