Yo quiero creer en un país con esperanza, yo quiero creer que la maldad termina, que hagamos las paces entre unos y otros pasando por la justicia sin que se tome como una venganza sino como un mecanismo en donde yo cedo, tu cedes, y en honor al trato, acepto un juzgamiento porque aparte de las leyes humanas del perdón y olvido, vivimos en una sociedad enmarcada en un Estado Social de Derecho, regidos por leyes que se deben acatar para vivir en armonía. No puede existir un quizás, quizás, quizás, como mecanismo para dejar a las victimas sin esperanza y ridiculizadas, ofreciendo un perdón sin sentimiento.
Paz! Es una palabra grande, bella, que libera pero que implica concordia y para tenerla, debemos seguir ciertos pasos como sociedad.
Los muertos no se levantan, no llegan a sus casas, la libertad no se devuelve, los dolores de la infamia no se borran pero en honor a las memorias de los días que se nos fueron, de los seres que viven en nuestro corazón, podemos albergar la posibilidad del perdón para hacer más llevadera esta vida presente que recorremos todos.
Venga hermano, acepte ser juzgado y gritemos paz. Venga hermano, acepte merecer un mínimo de justicia a su falta que fue grave, que fue lesa, que tuvo dolo, que acabo familias, que separó otras, que convirtió el campo en un mar de lagrimas y sangre. Venga hermano, acepte con humildad que merece justicia, (no venganza) para poder vivir, y ahí, salga y haga política. De no ser así, se elevaran millones de voces parecidas a la mía, que exigimos y repudiamos que lleguen al poder sin obtener votos.
El año tiene 52 semanas y yo tengo el mismo numero en la lista al senado por el Centro Democrático.
No hago campaña, lo mío es una causa por la reivindicación de las víctimas, por el Medio Ambiente y una Colombia sin corrupción. ¿Se suma?
Fujimori fue indultado pero qué gracioso ver a los mamertos indignados con ello., y aquí felices con el indulto a las Farc.