El nuevo capítulo de la corrupción en la justicia: el carrusel de principios de oportunidad concedidos por Montealegre y Perdomo.
Vuelve y juega
Continúan surgiendo nuevas evidencias de las irregularidades cometidas por la fiscalía general de la nación durante la oscura administración de Eduardo Montealegre Lynett y Jorge Fernando Perdomo, quienes, al mejor estilo de Santos, hicieron lo que les dio la gana.
En la investigación por la corrupción en la desparecida dirección nacional de estupefacientes, Montealegre y Perdomo desviaron el curso de la misma, para efectos de dejar impunes a los protagonistas del mismo.
En días pasados, la fiscalía de Néstor Humberto Martínez tomó la decisión de reversar unos cuestionados principios de oportunidad concedidos por Montealegre y Perdomo.
Impunidad
En criterio de la fiscalía de Martínez, aquellos principios de oportunidad fueron otorgados para garantizar la impunidad y no para esclarecer la verdad y castigar a los responsables de los hechos materia de investigación.
Una de las beneficiadas fue la señora Clara Eugenia Garrido, quien fuera directora del denominado Fondo de Rehabilitación, Inversión social y lucha contra el Crimen Organizado –Frisco-.
Contra aquella exfuncionaria existía un buen número de pruebas, las cuales habían sido recaudadas por una fiscal a quien intempestivamente le fue arrebatado el proceso para serle asignado al cuestionado Juan Vicente Valbuena, quien desde la fiscalía tercera delegada ante la corte suprema de justicia, se constituyó en “el niño de los mandados” de Montealegre y Perdomo.
Giro de 180 grados
Cuando el caso le fue asignado a Valbuena, éste le concedió un principio de oportunidad con inmunidad plena a la señora Garrido, sin que a ésta le fuera exigido absolutamente nada a cambio: no tuvo que delatar, confesar o devolver un centavo de los millones de pesos que esa mujer se apropió indebidamente.
Aquellos hechos resultaron inaceptables para el actual fiscal general de la nación, Néstor Humberto Martínez, quien ha solicitado que se revise dicho principio de oportunidad.
Adolfo Castillo y Deibi Robinson Rojas: los favorecidos por Perdomo
Ha trascendido que en su condición de fiscal general encargado, Jorge Fernando Perdomo ordenó otorgar un principio de oportunidad a favor de Adolfo Castillo y Robinson Rojas, en tiempo record y sin que se exigiera ningún tipo de colaboración con la administración de justicia por parte de los beneficiados con el mismo.
Estos ejemplos abren un nuevo episodio en la investigación por los hechos de corrupción en la justicia: el del carrusel de los principios de oportunidad con el que fueron cobijados muchísimos delincuentes durante la era Montealegre-Perdomo sin que mediaran criterios objetivos.
Montealegre adhirió a Vargas Lleras
En reciente acto político, el cuestionado Eduardo Montealegre adhirió a la candidatura del exvicepresidente, Germán Vargas Lleras. Aquello es un verdadero “abrazo de oso”. Nada le aporta Montealegre a un candidato presidencial, pero en cambio su respaldo se constituye en un pasivo gigantesco, pues más temprano que tarde terminará con confirmarse el papel neurálgico de ese exfiscal en la denominada Bacrim judicial.
Publicado: noviembre 16 de 2017