Reciente informe de la DEA asegura que durante los diálogos entre Santos y Farc, Estados Unidos fueron inundados con cocaína.
Proceso de paz embadurnado con cocaína
Se advirtió en todos los tonos y la respuesta del gobierno siempre fue la misma: que las denuncias eran una manifestación más de los enemigos de la paz.
Lo cierto es que durante los diálogos entre Santos y la banda terrorista de las Farc, nuestro país se llenó de plantas de coca, llegando a las 200 mil hectáreas cultivadas, cifra alarmante y preocupante.
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Y como es natural, aquellas plantas se convierten en clorhidrato de cocaína, el cual es traficado ilícitamente a otros países, particularmente los Estados Unidos.
La DEA, agencia norteamericana encargada de liderar la lucha contra las drogas ilícitas, acaba de publicar un informe desclasificado que indica que el 92% de la cocaína incautada en los Estados Unidos fue fabricada en Colombia.
Durante los diálogos, aumentó la producción
El mismo documento confirma que entre los años 2007 y 2012 –como consecuencia de la política de seguridad democrática-, hubo una significativa reducción en la producción de coca en Colombia, pero que a partir de aquel año, que coincide con el inicio de las conversaciones entre el gobierno Santos y la banda narcotraficante que lidera alias Timochenko, empezó a registrarse un impresionante aumento de los cultivos de esa planta cuya hoja es la materia prima para la fabricación de la cocaína.
En efecto, según la DEA, “Colombia experimentó un incremento del 134% en las plantaciones de coca entre 2013 y 2016, pasando de 80500 a 188000 hectáreas…El aumento de esos cultivos se debe a distintos factores, incluida la suspensión de la fumigación aérea y la erradicación manual”.
Santos se rindió frente a las drogas ilícitas
El informe resulta demoledor, pues pone en evidencia que bajo el gobierno del presidente Santos, el Estado colombiano se rindió en la guerra contra las drogas ilícitas.
Se lee en el informe que “aproximadamente, el 92 de la cocaína incautada en 2016 es colombiana. Colombia continúa siendo el primer proveedor de cocaína en el mercado de los Estados Unidos”.
Para la DEA, no hay duda que el crecimiento en la producción del alcaloide tiene una relación directa con los diálogos Santos-Farc: “Desde 2014, las negociaciones entre el gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, exacerbaron el problema de los cultivos de coca en Colombia. Algunos cabecillas de las Farc presionaron a los cultivadores para que sembraran más coca, ostensiblemente motivados por la convicción de que gracias al acuerdo con el gobierno, los programas de subsidio e inversión se enfocarían en áreas con grandes cantidades de coca. Adicionalmente, el gobierno de Colombia aflojó las operaciones de erradicación en las zonas controladas por las Farc, para reducir el riesgo de confrontaciones durante las negociaciones de paz”.
Ante semejante revelación de la agencia federal antidrogas de los Estados Unidos, el gobierno de Santos no puede apelar a su machacada fórmula de señalar que se trata de una “enemistad con la paz”. El gobierno, con conocimiento de causa, permitió que las Farc inundaran de coca a Colombia y de cocaína a los Estados Unidos.
Las consecuencias serán nefastas para nuestro país. No se descarta que el Congreso de los Estados Unidos resuelva hacer una revisión integral de la ayuda económica que se le otorga anualmente a nuestro país.
Así mismo, en recientes declaraciones a los medios de comunicación, el embajador Kevin Whitaker aseguró que su país seguirá insistiendo en la extradición de los cabecillas de las Farc, todos ellos con cuentas pendientes con la justicia norteamericana.
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Publicado: agosto 23 de 2017