Los jóvenes colombianos tenemos una responsabilidad histórica.
El hecho que el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela haya reversado la medida que le quitaba las facultades constitucionales a la Asamblea Nacional, no hace que la dictadura de Maduro sea menos dictadura.
Para nadie es un secreto que el Tribunal Supremo de Justicia es controlado por el dictador Nicolás Maduro. El Golpe de Estado en contra de la Asamblea buscaba dejar minimizada la oposición y con eso terminar de fraguar el colapso de Venezuela. Sin embargo, fue gracias a la presión internacional y al pueblo venezolano que se reversó la medida; la dictadura nunca se imaginó lo que iba a pasar.
Desde Bogotá es importante no dejar al pueblo hermano de Venezuela solo. Es fundamental salir a las calles – sin importar la nacionalidad- y presionar al gobierno de Juan Manuel Santos para que deje la complicidad con la dictadura. Los jóvenes jugamos un papel fundamental para que la presión rinda frutos.
El viernes 31 de marzo, varios jóvenes se reunieron en las puertas de la OEA para exigir la aplicación de la carta democrática y solicitarle al gobierno colombiano acciones firmes. Es hora de acoger a los hermanos venezolanos y organizarnos en torno a la causa de la libertad en Venezuela.
Maduro ha quedado desnudo ante el mundo como un golpista más.
No podemos permanecer indiferentes ante la dictadura de Maduro; en cualquier momento podremos vivir una situación similar en Colombia y vamos a necesitar a nuestros hermanos venezolanos.
Entretanto: 1. La marcha del pasado primero de abril fue un rotundo éxito. Es importante repetir el ejercicio democrático y no perder todo lo que se ha conseguido. 2. Se ha dispuesto una carpa exterior del Cantón Norte como punto de acopio de ayudas para Mocoa. La carpa está en la Brigada 13 – Cantón norte. Calle 106 con 7a. Bogotá. Se aceptan juguetes, ropa, zapatos, agua, biberones, leche en polvo, pañales, colchones, agua potable, suero, enlatados y comida no perecedera.
Publicado: abril 6 de 2017