El presidente Uribe debe reevaluar su decisión y solicitar que el CD expulse de sus filas a Juan Carlos Vélez.
Consecuencias de una mentira
No solo el Centro Democrático sino los demás grupos ciudadanos que integraron la coalición del NO están pagando las consecuencias de las mentiras dichas por el torpe exgerente de uno de los comités, Juan Carlos Vélez.
Como se supo esta semana, las declaraciones fantasiosas de Vélez, posiblemente influenciadas por el alcohol u otra sustancias, sirvieron para que la activista santista Lucy Jeanette Bermúdez redactara la proclama política con la que pretende hundir la legítima victoria del NO el pasado 2 de octubre.
En diálogo con LOS IRREVERENTES, uno de los promotores del NO que no hace parte del Centro Democrático, no ocultó su molestia con Vélez, a quien no dudó de calificar de “enano político y mentiroso compulsivo”.
La responsabilidad de Zuluaga
Óscar Iván Zuluaga, acostumbrado a evadir sus responsabilidades cuando las cosas salen mal, debe responder políticamente por el daño que Vélez le está haciendo a la coalición del NO. Al fin y al cabo, quien impuso al torpe exgerente fue, precisamente, Zuluaga quien se valió de su condición de director del Centro Democrático para imponer a ese jumento comodirectivo de la campaña.
Zuluaga, al menos debería ofrecerles excusas a los votantes por su falta de tacto a la hora de escoger a las personas que tienen responsabilidades importantes.
Pero aquello no sucederá. Para Zuluaga, Vélez es un líder de talla universal. La semana pasada estuvo reunido con él en Medellín, cuadrándolo para que se sume a su precandidatura presidencial.
Vélez miente
Desde su escondite, Vélez reaccionó a los duros cuestionamientos que le ha hecho el senador Ernesto Macías diciendo que él –Vélez- cedió su curul en el senado “para que llegaran allí compañeros del CD como Ernesto Macías. Y hoy me paga con calumnias e injurias”.
Aquello no es cierto. Vélez fue senador entre 2010 y 2014 por el partido de La U. Gracias a la ley de partidos que impide la doble militancia, él no podía en 2014 aspirar al senado por el Centro Democrático, razón por la que no pudo aspirar nuevamente a ser senador.
Así las cosas, Vélez está mintiendo –una vez más- porque si su curul fue cedida debió ser a uno de los Ñoños o a cualquier otro ‘prócer” de esa cuadrilla a la que llaman partido de La U.
Expulsar a Vélez del CD
Apenas estalló el escándalo desatado por las mentiras de Vélez sobre la forma como supuestamente se hizo la campaña del NO, el presidente Uribe generosamente descartó la expulsión de ese individuo del partido.
En criterio de muchos, el doctor Uribe fue laxo, pues no era la primera equivocación de Vélez quien no ha hecho fama por su inteligencia sino por sus metidas de pata.
Ahora que esa entrevista está siendo utilizada políticamente para emitir autos supuestamente judiciales con el fin de afectar la victoria del NO, el presidente Uribe debería reevaluar su decisión inicial y proceder a solicitar que la dirección política del Centro Democrático expulse de forma inminente a Juan Carlos Vélez.
@IrreverentesCol
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